En Mendoza renunciaron 800 autoridades de mesa y ya las remplazaron

Mañana, a partir de las 8, casi un millón y medio de mendocinos habilitados para votar saldrá a la calle con la intención de cumplir con su obligación. El movimiento que alterará la vida de domingo comenzará a disminuir a las 18, cuando cierren los comicios y empiece el recuento de los votos, resultado que se conocerá recién a las 21.

Si bien el Gobierno cuenta con un operativo que se repite cada vez que hay un despliegue de esta naturaleza, siempre hay cuestiones que ajustar a último momento. Una de esas son las autoridades de mesa y los temidos faltazos que compliquen el arranque.

En las PASO hubo que reemplazar a 2 mil personas convocadas (el 25%) y para la generales de mañana también hubo algunos huecos a cubrir. De las 8.238 personas que trabajaron en las Primarias y que se repiten mañana, alrededor de 800 (el 10%) renunció.

“Si bien son las mismas, hay muchas personas que solicitaron ser sustituidas por no estar en la provincia o tener alguna actividad. Ya reemplazamos y capacitamos a las nuevas autoridades”, señaló el juez federal con competencia Electoral, Walter Bento.

El magistrado explicó que en las PASO las mesas se constituyeron en un 100% recién a las 9 de la mañana, hecho que interpretó como un signo positivo. Para mañana espera la misma suerte. "Siempre tratamos de mejorar el procedimiento", dijo Bento. Quienes desempeñen esta tarea cobrarán $600  por elección y podrán sumar $450 más si se capacitaron.

Otra novedad para mañana es que desde el 13 de agosto hasta ahora, 717 jóvenes cumplieron 18, por lo que el voto ya no será optativo sino obligatorio. En total, son 32 mil chicos de 16 y 17 años habilitados para votar y el padrón total es de 1.407.748 ciudadanos.

En el ministerio de Seguridad dispusieron que 2.300 policías se distribuyan en las 565 escuelas habilitadas para votar y se sumen así al personal militar y de Gendarmería que tiene que estar en los establecimientos.

A su vez, habrá 700 policías patrullando y 1.000 de guardia en las comisarías. En total, son 4 mil efectivos policiales abocados a las elecciones. Por el lado de Salud, al equipo de domingo que suele haber en los hospitales se suman guardias pasivas, esto es, profesionales con el teléfono encendido para acudir ante cualquier urgencia.

Por su parte, la novedad de este proceso eleccionario (incluyendo las PASO del 13 de agosto) es que el Gobierno optó por pagarle a los celadores un adicional de $700 para que limpien el mismo domingo y así asegurar que el lunes haya clases.

El mismo ítem cobrarán los empleados que atiendan los CDR abiertos el fin de semana. En total, habrá 64 Centro de Documentación Rápida para aquellos que necesiten retirar sus DNI. El sábado atenderán de 8 a 13 y el domingo de 8 a 18.

Para tener en cuenta, podrán viajar gratis aquellos que justifiquen su voto. Para los colectivos de distancia urbana, es necesario presentar el DNI para certificar la dirección. En el caso de los suburbanos, media y larga distancia habrá que ir a las boleterías el sábado hasta las 13 con DNI y una fotocopia.

¿Qué se elige?

Las elecciones de mañana son exclusivamente legislativas, más conocidas como “de medio término”. En total, se renuevan 5 bancas de diputados nacionales, 19 senadores y 24 diputados provinciales, y la mitad de los concejos deliberantes en 17 de los 18 departamentos (San Carlos desdobló su elección para la categoría municipal).

En competencia hay cuatro listas: Cambiemos, encabezada por Claudia Najul, Somos Mendoza, por Omar Félix, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores, por Noelia Barbeito, y el Partido Intransigente, por José Luis Ramón.

El camino del voto después de la urna

Una vez que haya votado el último elector y se cierren las escuelas, comienza un proceso generalmente desconocido por la gran mayoría de los electores. A partir de las 18, los presidentes, vicepresidentes y fiscales de cada mesa procederán a abrir las urnas y volcar el contenido en el escritorio.

A partir de ahí, las autoridades acumulan los votos coincidentes, suman los resultados y ven si coinciden con el padrón. Una vez hecho este balance, comienzan dos procesos paralelos. Por un lado, los datos se vuelcan a los telegramas que se lleva el empleado de Correo Argentino. Esta dependencia remite los resultados  a Buenos Aires, en donde el Correo Central hace el escrutinio provisorio con la información de cada mesa de las 24 provincias. Estos datos son los que se conocen mañana a partir de las 21.

En cambio, los sobres y las urnas siguen por otro camino. Una vez contados los votos, todo este contenido junto con las actas se ponen en una bolsa que luego es precintada. Esta documentación se abre el martes para comenzar con el escrutinio definitivo.

Pero a esos caminos oficiales se suma uno “paralelo”, que permite conocer los resultados antes de las 9. Este proceso está protagonizado por los fiscales que cada partido designa para cuidar la reposición de boletas. Este personal voluntario también controla la apertura de las urnas y participa del conteo de los votos. Una vez que tienen los resultados, se comunican entre ellos (generalmente por Whatsapp) y adelantan cómo han quedado en cada mesa. De allí que cada partido sabe si va ganando o no, antes de las 21.