Para combatir la enfermedad de Chagas, endémica en toda la región, históricamente se apuntó a combatir la vinchuca, insecto que si está infestado con el parásito Trypanosoma cruzi transmite la afección.
Pero hoy en día el vector está más controlado y si bien se sigue trabajando, las campañas de prevención se centran en la transmisión de madre a hijo. Así fue que ayer se realizó la “Primera Caminata Nacional por una Infancia Sin Chagas” con el fin de fomentar la prevención del Chagas congénito mediante la detección oportuna en mujeres embarazadas, recién nacidos de mamás infectadas, niños y menores de 19 años.
En este marco Horacio Falconi, supervisor técnico del Programa Provincial de Chagas, dio a conocer que anualmente se detectan alrededor de 36 bebés con Chagas.
“Es un número estimativo porque hay años que aparecen más y otros menos”, aclaró el profesional, que explicó que se trata de casos agudos de niños nacidos de madres chagásicas. Otro dato fundamental que aportó es que las mamás que poseen la enfermedad tienen solamente un 6% de probabilidades de transmitírsela a sus hijos.
“Es muy importante que la mujer embarazada se realice los controles preparto que detectan la afección, ya que si uno tiene la mayoría de las madres controladas se asegura una correcta pesquisa”, señaló.
Además, sabiendo que la mamá posee Chagas, se procede a analizar al bebé y si heredó la patología puede comenzar un tratamiento altamente efectivo.
“Ese niño hasta los 19 años tiene el 100% de probabilidades de curarse”, remarcó María Belén Rodríguez, encargada del componente Información, Educación y Comunicación del programa. Ella precisó que el Estado garantiza tanto el diagnóstico como el tratamiento de la enfermedad en forma gratuita en hospitales y centros de salud de toda la provincia. “Sólo hay que demandar este servicio”, aseguró.
Casos vectoriales
En el programa provincial también se contabilizan los casos transmitidos a través de la vinchuca conocidos como vectoriales. Los mismos se dividen en crónicos y agudos: "Los primeros se refieren a aquellas personas que se contagiaron como promedio hace 20 años y recién se conocen ahora. De ellos se detectan entre 500 y 700 casos por año", detalló Falconi a la vez que indicó que el número es estimado porque a veces no funciona bien la exclusión y hay personas que pueden contabilizarse más de una vez.
Con respecto a los agudos vectoriales, personas picadas por una vinchuca infectada en el corto plazo, aseguran que no se presentan casos desde 2004.
“Esos son los más graves porque la persona se transforma en una portadora y si una vinchuca sana la pica puede seguir transmitiendo la enfermedad”, explicó Rosana Valot, titular del programa. La mujer también informó que durante 2014 se analizaron 3.600 vinchucas y que sólo dos de ellas fueron identificadas como portadoras de Trypanosoma cruzi.
30.000 viviendas en riesgo
Si bien el Chagas puede aparecer tanto en áreas urbanas como rurales, en este segundo ámbito se trabaja fuertemente desde el programa. Para ello se han identificado en toda la provincia alrededor de 30.000 viviendas de riesgo en las que se pone mayor esfuerzo. "No se eligen solamente por el estado de la vivienda, sino porque quedan en zonas que tienen menos acceso a los servicios", detalló el supervisor técnico.
Las medidas que se aplican allí tienen que ver con la fumigación, pero también en aspectos educativos. “Hay que cambiar muchas costumbres, porque generalmente en esos hogares hay una cultura de autosustento y hay cría de animales lo que trae aparejada la presencia de vinchucas”, señaló. La tendencia de estas personas es tener los corrales cerca de las casas, pero ellos recomiendan instalarlos lo más alejados posibles.
En cuanto a los departamentos más “problemáticos” Falconi mencionó a Lavalle, Santa Rosa y La Paz como los primeros en la lista. “En esos departamentos hay localidades y barrios que se los cataloga como endémicos porque desde siempre hubo vinchucas”, añadió.
Chicos presentes
Unos 200 estudiantes con pecheras celestes participaron de la "Primera Caminata Nacional por una Infancia Sin Chagas" que se realizó ayer en la plaza Independencia. Formados en fila, los jóvenes recorrieron todo el perímetro del espacio verde entonando cánticos a favor de la prevención del Chagas. También repartieron folletos realizados por ellos mismos y mostraron carteles que confeccionaron en horas de clase.
“Hace poco nos dieron una charla en la escuela y nos pareció muy importante conocer todo sobre el Chagas”, expusieron Hanna (10) y Guadalupe (10) de 5to grado de la escuela normal Tomás Godoy Cruz. Por su parte, Eliseo (12) y Mauro (12) de la misma institución reconocieron que nunca antes habían escuchado de la enfermedad, pero que aprendieron mucho al respecto.
“Por ejemplo si te encontrás una vinchuca en tu casa hay que atraparla en una bolsa y llevarla para analizar y si está muerta hay que remojarla con un algodón con alcohol”, detallaron.
Vinchucas urbanas
A raíz de la plaga de palomas que desde hace varios años invade la ciudad, es cada vez más común observar vinchucas en el Centro mendocino.
“En la ciudad las vinchucas están relacionadas con la alimentación de aves, pero no hay que preocuparse ya que uno puede tener un montón vinchucas y no tener problemas con Chagas, ya que hace falta que estén infectadas con el parásito”, explicó Horacio Falconi, supervisor técnico del Programa Provincial de Chagas.
De hecho cada año se analizan aproximadamente entre 300 y 500 vinchucas de zonas urbanas. “Hasta ahora ninguna ha dado positiva”, remarcó.