En una de las peores semanas para el Gobierno desde que asumió Mauricio Macri como presidente, debido al escándalo del Correo y la polémica por el retoque a la baja del aumento de las jubilaciones, Cambiemos logró dos victorias al hilo en el Congreso: la sanción de la reforma del régimen de ART y el aval al DNU que endurece la ley migratoria.
La particularidad de ambos triunfos es que el oficialismo los consiguió con la sorpresiva ausencia de legisladores del Frente para la Victoria.
El miércoles a la noche, cuando finalizaba la sesión, los bloques que lideran los exkirchneristas Sergio Massa y Diego Bossio le retiraron su apoyo a la ley de ART al enterarse que el Gobierno había modificado por resolución la fórmula de cálculo de la ley de Movilidad Jubilatoria. Ambos espacios se abstuvieron. La votación la ganó Cambiemos con 88 votos a favor, 44 abstenciones y 22 votos en contra.
Durante la votación, los diputados del Frente para la Victoria-PJ, la bancada más numerosa de la cámara baja, se quedaron sospechosamente de pie junto a sus poltronas, para figurar como ausentes y no votar.
“Si el kirchnerismo se sentaba y votaba en contra, caía la ley. Salvaron al Gobierno”, afirmó Massa al día siguiente de la sesión. El tigrense, de todas maneras, iba a votar a favor del proyecto y no mandó a su tropa a votar en contra, sino a abstenerse.
El kirchnerismo argumentó que si, en lugar de abstenerse, el massimo y el bloque de Bossio no daban quórum, la ley se caía.
Así, la ley de ART fue rechazada solamente por el Movimiento Evita (bloque Peronismo para la Victoria), Progresistas (socialismo, Libres del Sur y Margarita Stolbizer) y el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT).
"Pacto"
“Hay un acuerdo en Diputados entre el FpV y el Pro, quizás porque es una forma de bajarle el precio a Massa en un año electoral”, denunció el diputado cordobés Andrés Guzmán, del Movimiento Evita, en diálogo con este diario.
“A vos como diputado te pagan para ir, discutir y votar, no para pararte al lado de tu banca a especular. Justo cuando apareció la oportunidad de rechazar esta ley que va en contra de los trabajadores, después de que el Frente Renovador y los justicialistas se rebelaron y dijeron que iban a abstenerse, los kirchneristas en vez de aprovechar para votar en contra se quedaron parados. Eso deja al desnudo el pacto entre el FpV y el Pro”, insistió Guzmán.
El diputado del Peronismo para la Victoria atribuyó directamente la estrategia del kirchnerismo a los referentes de La Cámpora, tales como “Wado de Pedro, el Cuervo (Andrés Larroque) y Máximo” Kirchner.
La diputada mendocina Soledad Sosa, del Partido Obrero (PO), dijo que no se puede confiar en el peronismo como oposición: "Desde sus distintas caras, los peronistas jugaron un rol para que el macrismo aprobara con tan sólo 88 votos (de los 257 posibles) esta reforma antiobrera de la ley de ART. Unos se abstuvieron, otros directamente ni votaron. Así es la oposición peronista", dijo a este diario.
La diputada trotskista calificó al peronismo de "oposición a la carta" y sostuvo que esto se evidencia en los acuerdos que mantienen los gobernadores del PJ con la Casa Rosada. "No son oposición. Son socios para descargar el ajuste", lanzó.
Sorpresivo faltazo
El jueves al mediodía, doce horas después de la sanción de la ley de ART, Cambiemos ganó otra batalla legislativa en la Comisión Bicameral de Trámite Parlamentario, que se encarga de emitir dictámenes de aprobación y rechazo sobre los DNU del Ejecutivo. En este caso fue sobre el que dispone cambios a la ley migratoria, con el fin de limitar el ingreso de extranjeros al país.
Cambiemos ganó provisoriamente la votación por 6 a 5 tras el faltazo de legisladores del PJ-FpV: los senadores Graciela de la Rosa (Formosa), Juan Manuel Irrazábal (Misiones) y Daniel Lovera (La Pampa), y los del sanluiseño Adolfo Rodríguez Saá y el diputado massista Raúl Pérez.
Lovera ingresó justo para esta reunión de la bicameral en reemplazo permanente del bonaerense Juan Manuel Abal Medina. Abal Medina juega políticamente con el jefe del bloque PJ-FpV, Miguel Ángel Pichetto, que se declaró abiertamente a favor de la reforma migratoria propuesta por el gobierno de Mauricio Macri.
Lovera aún no firmó dictamen de rechazo, al igual que De la Rosa e Irrazábal y así la votación la gana Cambiemos con las seis rúbricas de los diputados macristas Pablo Tonelli (Capital Federal) y Nicolás Massot (Córdoba); los radicales Luis Petri (Mendoza) y Martín Hernández (Formosa), y de los senadores radicales Silvia Giacoppo (Jujuy) y Luis Petcoff Naidenoff (Formosa).
Los cinco kirchneristas que sí firmaron el rechazo son los diputados Marcos Cleri (Santa Fe), Juliana Di Tullio (Buenos Aires) y Diana Conti (Buenos Aires) y los senadores Mario Pais (Chubut) y Anabel Fernández Sagasti (Mendoza).
Esta victoria de Cambiemos es provisoria: el camporista Cleri, presidente de la bicameral, aclaró que la votación está abierta porque para el dictamen de mayoría se requieren, según el reglamento, al menos 9 de las 16 firmas posibles (la mitad más uno). El final quedará para la próxima reunión de la comisión, aún sin fecha.
"Socios"
La diputada Sosa, que sin formar parte de la bicameral presenció la reunión para expresar el rechazo de la izquierda al DNU migratorio, dijo que “no llamó la atención que no estuviera todo el Frente para la Victoria”, porque en el fondo “tienen el mismo pensamiento que el Gobierno”. “Las declaraciones de Pichetto contra los inmigrantes son un ejemplo. Es una oposición socia”, aseveró la mendocina.
Sin perjuicio del filtro parlamentario de la bicameral, la reforma migratoria ya está vigente desde la publicación del DNU. Para que quede sin efecto, el decreto debe ser rechazado por el pleno de ambas cámaras del Congreso tras haber sido analizado por esta comisión.
De esta manera, Cambiemos consiguió esta semana las dos primeras victorias parlamentarias de 2017 gracias a las ausencias, deliberadas o involuntarias, de legisladores kirchneristas. Y a un peronismo desunido.