La biografía de Chalo Tulián podría ser la crónica de una generación entera: la que zarpó de aquí siguiendo el éxodo de los '70. Vivió el exilio como autoconocimiento, extrañó, regresó y puso energía para seguir creando, sembrando en las nuevas generaciones la llamita del arte.
En los años duros vivió en Puebla (México). Allí, encontró una patria adoptiva que le dio trabajo, amigos, inspiración y descendencia. Junto a Estela Labiano, su compañera, tuvo que marcharse. "Cuando te detenían por portación de barba", nos contó.
Luego regresó para hacer historia en su pago chico.
El gran artista plástico, escultor, pensador, falleció en febrero de este año, dejando un vacío notorio en la escena artística argentina.
Hoy a las 13 se inaugurará en el espacio de arte Luis Quesada, ubicado en el Hall Central del CICUNC, una muestra homenaje a su ideario y su obra.
La muestra se expondrá durante dos meses y se podrá visitar de lunes a viernes, de 8 a 20, con entrada gratis.
Además, el viernes se concretará un reconocimiento a su labor y se descubrirá una placa con su nombre, en el ingreso a la sala Roja de la Nave Universitaria.