Sin dudas Sandro fue uno de los ídolos máximos de la música Argentina. A lo largo de su carrera publicó 52 discos y realizó 16 películas que quedaran engravadas a fuego en la memoria de millones de argentinos.
Con los años, su adicción al cigarrillo causó estragos en su salud lo cual lo llevó a alejarse de los escenarios.
Las apariciones de “El Gitano” se hicieron cada vez más escasas pero siempre guardó un lugar especial para sus fans mejor conocidas como “Las Nenas”.
Así, el músico se refugió en su enigmática casa de Banfield desde donde saludaba a sus fans cada 18 de agosto, cuando iban a hacer guardia por su cumpleaños.
Nueva años después de su muerte, el fotógrafo Hernán Churba tuvo la posibilidad de entrar a la casona de Roberto Sanchez y la dejó inmortalizados el costado más íntimo del ídolo argentino en una fotogalería imperdible.
Churba consiguió entrar a la casa gracias a una amistad que había entablado con el hijo de Olga Garaventa, la viuda del músico. Según contó en una nota escrita por él mismo para Clarín, empezó a trabajar con Pablo Ferraudi sin saber quién era su madre.
"Nos fuimos conociendo con Pablo y entablando una amistad. Un día me llevó a Banfield, a conocer la mística y mítica ´mansión´ del gran ídolo musical. Recorrimos la casa entera, y terminamos tomando un café con Olga en la cocina. Sentados a la misma mesa donde había pasado la mayor parte de sus horas junto a Sandro, en la intimidad. Tomamos de unos pocillos que tienen una gran imagen de una rosa roja. Hablamos sobre el lugar y sobre ´Roberto´", contó.
Churba sugirió retratar la casa y Olga aceptó. "Fue un período de casi dos años de ir a fotografiar todos los ambientes, de complementar planos y de ensayar diferentes tomas", dijo.
A través de un recorrido íntimo y reparando en cada detalle, el fotógrafo se esforzó al máximo para capturar todos los aspectos de la mansión que albergaron al músico las ultimas décadas de su vida.