La típica postal de la escuela Don Bosco, conformada por unos 1.000 varones, comenzará a cambiar a partir del año que viene. Es que en 2019 por primera vez recibirán niñas en la sala de 4 del nivel inicial y en el primer año del secundario. De esa forma, sólo quedarán tres colegios exclusivos en Mendoza: dos de mujeres (la primaria Patricias Mendocinas y el Portezuelo) y una para varones (Los Olivos). Se trata de un modelo educativo que caracterizó a las escuelas confesionales del siglo pasado y que comenzó a modificarse desde la década del 90. Los avances sociales marcaron el inicio de un proceso de transformación, en el que comenzó a priorizarse la educación mixta o coeducación.
En el caso de Don Bosco, la sede ubicada en calle Córdoba de Capital era la única que quedaba únicamente para varones, ya que las de Rodeo del Medio (Maipú) y Eugenio Bustos (San Carlos) son mixtas desde hace unos 10 años.
Desde la institución comentaron que encararon un "Proyecto de Coeducación" luego de una larga reflexión interna. "El año pasado recibimos al visitador que viene en nombre del Rector Mayor desde Roma, quien nos dijo que pensáramos sin prejuicios el tema de la coeducación", recordó el padre Miguel Mestre, represente legal de la institución. A esto se le sumaron consultas con los padres y las autoridades de la congregación, así como las educativas.
"Va a ser todo un desafío por eso vamos de a poco: abrimos solamente la sala de 4 años y el primer año del secundario", explicó. Se estima que serán una 70 alumnas las que podrían incorporarse el año que viene e ir creciendo en número a medida que pase el tiempo.
Tal como adelantó el sacerdote, la reacción de la comunidad ha sido muy positiva y ya han tenido consultas por inscripciones, sobre todo en el nivel inicial. “Favorece los valores compartidos y permite que las familias permanezcan unidas”, fueron las ventajas que enumeró el representante legal de Don Bosco, quien aclaró que todavía tienen que hacer algunas reformas edilicias. “Igualmente lo más importante es adaptarnos con la mente y con el corazón abierto”, señaló.
Las exclusivas
Dos de los establecimientos educativos de la provincia que seguirán recibiendo sólo varones o sólo mujeres son los colegios privados Los Olivos y Portezuelo, respectivamente. Ambos pertenecen al Grupo Educativo Apdes (vinculado al Opus Dei), que cumple 50 años en el país y del que también depende el jardín Platero, que sí es mixto.
En su página web detallan que desarrollan "una educación integral de calidad que ayude a los padres en la formación integral de sus hijos. Atendiendo a la singularidad de varones y mujeres procuramos un ambiente que fomente el desarrollo de las virtudes cristianas y el buen uso de la libertad", lo que indica que no tienen pensando cambiar de modalidad.
La última escuela que recibe alumnos de un solo sexo es para niñas: la tradicional primaria Patricias Mendocinas, la única de gestión pública que todavía conserva esa característica. En este caso, la exclusividad no se corresponde con lo confesional, sino con la historia de la institución y con una cláusula que involucra al terreno donde se edificó la escuela. Según publicó este diario en notas anteriores, los terrenos fueron donados con la condición de que en el lugar siempre funcionara una escuela para niñas, por lo que desde la Dirección General de Escuelas (DGE) no tienen planeado modificarlo.
Otras instituciones que eran sólo para mujeres y comenzaron a recibir varones en los 90 fueron el Liceo Alfredo Bufano, el colegio María Auxiliadora y el Sagrado Corazón.
Los pioneros
Tal como se publicó en una nota de Los Andes del año 2003, uno de los primeros establecimientos educativos en adentrarse en la educación mixta fue otro tradicional colegio religioso, San José de los Hermanos Maristas.
Fue en el 84 que las niñas se ganaron un lugar en las salitas de jardín. Y así, paulatinamente, se fueron integrando.
Según explicaron en ese entonces, el cambio más profundo fue para los docentes, en especial los del secundario.
Hoy, la gran mayoría de los colegios confesionales reciben alumnos de ambos sexos.