El paquete de medidas anunciado por el gobernador Rodolfo Suárez trajo alivio para quienes habitan fuera del Gran Mendoza. La puerta la abrió el presidente Alberto Fernández el fin de semana, cuando permitió que zonas con baja circulación del coronavirus y con menos de 500 mil habitantes podrían a recuperar algunas actividades.
Los jefes comunales que se encuentran fuera del Gran Mendoza celebraron el levantamiento de las restricciones para actividades económicas bajo estrictos protocolos sanitarios para Lavalle, San Martín, Rivadavia, La Paz, Santa Rosa, Junín, Tunuyán, Tupungato, San Carlos, General Alvear, Malargüe y San Rafael. La circulación será de acuerdo a la terminación del DNI.
De esta manera, "todas las profesiones y todos los comercios fuera del Gran Mendoza, están habilitados siempre y cuando se cumpla con los protocolos, incluido el servicio doméstico siempre y cuando el dueño de casa lo permita", precisaron desde el Gobierno.
Los comercios de los departamentos que no corresponden al Gran Mendoza podrán abrir sus puertas de 8 a 18 y recibir clientes por el último número de documento: del 1 al 5, lunes, miércoles y viernes, y del 6 al 0, martes, jueves y sábados. En caso de que abran los domingos, de 8 a 13 podrán asistir los DNI terminados del 1 al 5 y de 13 a 18 los terminados del 6 al 0.
También quedan exceptuadas del aislamiento social, preventivo y obligatorio las peluquerías y las profesiones liberales (abogados, contadores públicos, escribanos, corredores inmobiliarios), siempre y cuando cumplan con los protocolos establecidos paras las actividad ya exceptuadas, como la obra privada, la atención odontológica o las ópticas.
En el caso de las peluquerías, sólo podrán atender con turno previo, no podrán hacerlo con personas consideradas dentro de los grupos de riesgo ni tener clientes en espera. Los sillones deberán mantener la distancia mínima de 2 metros, además de mantener ventilado el local. Es obligatorio el uso de barbijo, guantes, delantal y en lo posible máscara.
Se deberá desinfectar antes y después de la atención de cada cliente las herramientas de trabajo y el espacio de atención; también se solicita evitar el uso del secador de cabello y tener a disposición del cliente alcohol en gel, o alcohol al 70%. Los clientes deberán completar la declaración jurada de salud.
Para quienes desempeñen profesiones liberales, deberán contar con credencial que acredite tal condición y su DNI al movilizarse. Los desplazamientos deberán respetar el distanciamiento social de 2 metros, al igual que para comunicarse entre personas. Si lo hacen en vehículos deberán contar con medidas de higiene obligatoria y capacidad de personas transportables.
Se deberá evitar la realización de entrevistas personales, debiéndose realizar el asesoramiento por teléfono o medios virtuales. En los estudios profesionales u oficinas sólo se podrá atender a clientes con turno previo y bajo ninguna circunstancia podrán atender de manera presencial a personas de los "grupos de riesgo".
Para el caso en el que el profesional considere imprescindible concretar una entrevista personal, deberá facilitar un turno al cliente, de modo que al mismo le quede constancia por escrito, de tal forma que el mismo sirva –a su vez- de certificado para ser presentado ante las autoridades pertinentes como autorización de circulación.
Asimismo, en las consultas, el profesional podrá recibir solamente a una persona por vez y no se podrán pautar más de 4 consultas diarias. Entre las entrevistas se deberá proceder a la limpieza y desinfección de los muebles utilizados y elementos de trabajo. En todos los casos, tanto los profesionales como personal de la oficina y clientes deberán utilizar tapabocas.
Los profesionales podrán permanecer trabajando en sus estudios u oficinas de 9 a 18. Se recomienda no permanecer en la misma oficina trabajando más de 2 personas, respetando siempre el distanciamiento interpersonal.
En caso de que resulte absolutamente imprescindible la asistencia de más personal, el mismo siempre deberá respetar el distanciamiento social de 2 metros entre cada puesto de trabajo. No deberán compartir utensilios de uso personal. Por ejemplo: artículos de librería, vasos, botellas, mate, entre otros.
Las superficies que se tocan con frecuencia (pasamanos, pomos de puertas, fichas de estacionamiento, ascensores, escaleras eléctricas, entre otros), deberán ser lavadas con productos a base de agua con hipoclorito, alcohol al 70% o productos desinfectantes.
Las superficies del baño y el inodoro, deberán ser limpiadas con material desechable y desinfectado diariamente con productos a base de agua con hipoclorito o productos desinfectantes.
Se recomienda no recibir papeles en los estudios u oficinas. Destinar un espacio o mostrador donde los papeles puedan ser dejados y posteriormente retirados, de modo de evitar el contacto entre personas. Este sitio deberá ser higienizado frecuentemente.
En todos los casos, los empleados y profesionales al momento de retomar sus tareas, y los eventuales clientes al momento de ingresar al local deberán completar la declaración jurada de salud.
Rispideces municipales
El tema de la habilitación de comercios generó contrapuntos en los intendentes de las grandes urbes porque entienden que la recreación podría haber esperado, además de la dificultad en los controles y en donde se apela a la conciencia de las personas que decidan salir. Algunos consideran que podría haberse habilitado la actividad comercial, de la misma manera que en las zonas más alejadas, porque sus facturaciones también se caen a pedazos y no todos están en condiciones de adaptarse a las nuevas tecnologías.
Luján de Cuyo está dentro del Gran Mendoza y por eso no tendrá flexibilización de cuarentena. El jefe comunal Sebastián Bragagnolo ha pedido que se tenga consideración en lo que respecta al comercio.
"No estamos pidiendo la habilitación de nuevos comercios, sino que los que ya están funcionando a puertas cerradas y con la entrega a través de delivery se les pueda permitir el retiro en el punto de venta. Esto no es abrir, sino que de la misma forma que retira un delivery, pueda hacerlo una persona que va al almacén a comprar y le queda de pasada", explicó el intendente a Los Andes.
En este grupo se incluyen por ejemplo los locales de indumentaria y de calzado, entre otros. El inconveniente por ejemplo en Luján, es que los servicios de delivery no tienen la cobertura como la demanda reclama. Hay sistema de compra online, a través de la página, de redes sociales o de WhatsApp, pero a la hora de hacer la entrega surgen estos inconvenientes y la venta no se concreta.
La intención del intendente es que se analice la situación de Luján.
