En algunos rubros del sector privado ya comenzaron las discusiones paritarias, pero en otros están próximas a darse. Empresarios locales adelantaron que este año el techo estará dado tanto por la inflación proyectada (41,7%), como por las posibilidades reales de cada actividad. Varios ya tienen un número en mente: entre 25% y 30%, en el mejor de los casos y sumas no remunerativas que ayuden en el corto plazo al trabajador.
El bono por decreto que dio la Nación, que alcanzará los $ 4.000 a partir del mes de febrero (fin de mes o primeros días de marzo, según el régimen de pago) terminó adelantando la discusión salarial. Es que lejos de ser un "bono", como se señaló en un principio se trata de un "incremento previsto que deberá ser absorbido por las futuras negociaciones paritarias".
Así, teniendo en cuenta que el salario promedio del sector privado para Mendoza alcanzó los $ 34.188 netos en diciembre (valor proyectado en base al último dato disponible en los registros del ministerio de Trabajo de la Nación), con el bono superaría los $38.000, y en las siguientes paritarias, habría que considerar que ya se otorgó un aumento del 12%.
Posición empresarial
Los empresarios locales este año atacarán el tema salarial por dos frentes. Por un lado buscarán lograr una suba en promedio del 30%, algo que convalide el mercado. Y otro, tratarán de regionalizar la paritaria para evitar caer en la misma bolsa que Buenos Aires.
"Me imagino una negociación parecida a la del año pasado, partiendo del 30% -en promedio- y con cláusulas de recomposición de acuerdo a los diferentes convenios. Entre ellas, la entrega de bonos no remunerativos como solicitó el gobierno", señaló a Los Andes, Federico Pagano, presidente del Consejo Empresario Mendocino (CEM)
Agrega: "en la negociación los dos sectores tendrán la razón, porque ante este nivel de actividad económica los incrementos salariales representarán mucho para la empresa y muy poco para el bolsillo del empleado, en el medio de ambos también influyen los impuestos que recauda el estado sobre el empleo".
Otras cámaras ya están trabajando a nivel nacional la posibilidad de hacer una negociación provincial o regional.
Daniel Ariosto, titular de la Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM), señaló que se ha solicitado desde las distintas cámaras del interior del país, que integran la Cámara Argentina del Comercio, abogar por la "regionalidad" ante el Gobierno Nacional.
"Las paritarias son nacionales, y no resulta lo mismo aplicar un incremento en Buenos Aires, en donde hay mayor movimiento, que hacerlo en Mendoza o en cualquier región con menos habitantes. Nos gustaría decidir los incrementos de acuerdo a nuestras posibilidades", explicó Ariosto.
El empresario remarcó que "la gente se merece un incremento", pero el comercio no está atravesando un buen momento y sería deseable obtener un incentivo a cambio, vía "reducción del impuesto al cheque, IVA, o contribuciones patronales".
Construcción y metalmecánica
"Lo que se decreta indudablemente hay que obedecerlo, luego viene la discusión de lo que las empresas están en posibilidades de pagar o no. En nuestro caso, la paritaria de la UOM se da entre marzo y abril, y allí negociaremos cómo manejar el incremento", explicó Pedro Bizzotto, titular de Asinmet.
El empresario metalmecánico destacó que si bien la inflación ha sido muy grande y, por tanto, se entiende que será necesaria una recomposición, la recesión afectó a las empresas y la actividad industrial continúa en caída. "Se complica poder pagar, veremos cómo resulta esto y si no genera más desempleo", agregó.
Este rubro tiene la particularidad de que durante el año 2019 mientras algunas actividades mostraron grandes caídas como la metalmecánica dedicada a la construcción o a la industria, otros como el sector petrolero muestran crecimientos, y cada rubro deberá negociar también teniendo en cuenta esa situación.
De igual manera, Marcelo Bargazzi, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción filial Mendoza, señaló que el panorama del sector resulta "desolador", y ese es el marco en el que se discutirán las paritarias.
"Ya hemos pagado el aumento por decreto, pero se va a dar a cuenta de paritarias y se está trabajando en eso con los gremios. Deberemos sentarnos a ver cómo se sigue. Hasta ahora no hubo negociaciones, lo único que hicimos fue cumplir con el decreto y a mitad de año analizaremos de nuevo", destacó.
El sector ve una señal en el posible retorno del Procrear para la construcción, pero de acuerdo con Bargazzi, habrá que analizar en qué condiciones se relanza el programa, y "si la gente se va a querer meterse en un crédito".
Por su parte, Adolfo Brennan de la Federación Económica de Mendoza coincidió en que "la crisis ha sido diferente según cada sector", y que cada uno debería poder discutir los incrementos salariales dentro de sus posibilidades.
Trabajadores de casas particulares piden nuevo aumento
Los trabajadores de casas particulares todavía no tienen previsto un incremento para este año, pero sus delegados gremiales están solicitando una rápida recomposición salarial ya que fueron excluidos del "incremento solidario".
"Upacp solicitó oportunamente que se reúna la Comisión Nacional de Trabajo de Casas Particulares para tratar de resolver un ajuste salarial para nuestro sector. Esto ahora en consonancia con el artículo 4° del decreto de aumento salarial (en el que se explica que quedan excluidos), se evaluará la posibilidad de instrumentar medidas tendientes a contemplar la situación de dichos trabajadores", señalaron desde el gremio en un comunicado.
El último incremento del sector se dio en noviembre (10%), con lo que se terminó de completar un incremento del 30% en tres tramos, y el salario sin retiro llegó a $ 18.364, y a $ 16.515, con retiro, o de $ 177 a $ 134 el sueldo por hora, dependiendo de las tareas que se desempeñen.
Por ahora, tanto este sector como el de los empleados rurales quedaron fuera del bono, por lo que se espera un recomposición en estos salarios. Sin embargo, todo dependerá de la Nación.