Cinco empleados municipales de Lavalle se encadenaron hoy en la puerta de la Municipalidad para reclamar su reincorporación inmediata. Denuncian que fueron separados de sus cargos el lunes arbitrariamente y aseguran que se quedarán allí el tiempo que sea necesario.
En este tenso contexto, la senadora electa del
Frente de Izquierda
,
Noelia Barbeito
, señaló que "la policía vino a amedrentar a los trabajadores y los mantiene detenidos ilegalmente dentro del edificio”. Además aseguró que militantes de
La Cámpora
se encuentran en el lugar.
Estos cinco trabajadores “se presentaron el día lunes a trabajar y a la hora de salir les comunican de boca que a partir del día siguiente no fueran más porque estaban despedidos”, contó
Ester Urquiza
, delegada gremial de
ATE Lavalle
a un medio radial local.
La gremialista dijo que estos casos están dentro de los “famosos contratos de locación”, que son “trabajadores en negro” y se lamentó porque “estos chicos ya estaban en el cronograma de pase a planta y sin ninguna justificación fueron despedidos. (A las autoridades) no les importa nada, la esposa de uno de los compañeros cursa un embarazo de alto riesgo y la mujer de otro de los chicos es discapacitada”, sentenció Urquiza.
Por su parte, Barbeito, que se encuentra en el lugar, asevró en un comunicado que "la policía vino a amedrentar a los trabajadores y los mantiene detenidos ilegalmente dentro del edificio de la Municipalidad” Y agregó que “estos despidos expresan la voluntad del Intendente municipal
Roberto Righi
de violar el acta firmada en enero, que decía que no iba a haber represalia contra los trabajadores que conquistaron su pase a planta permanente luego de 29 días de lucha”.
La senadora también denunció que enviaron “una patota de 40 personas, entre los que se encuentran militantes de La Cámpora de la
Facultad de Ciencia Política de la UNCuyo
, para intimidar a quienes estamos afuera apoyando a los trabajadores”.
El conflicto
Los cinco empleados que están encadenados en el edificio municipal trabajaron para Lavalle entre un año y medio y nueve años, según cada caso.
Ester Urquiza
, delegada gremial de
ATE Lavalle
, explicó que no deberían existir estos despidos porque tras el conflicto que protagonizaron los municipales y el Gobierno por mejores condiciones laborales, que se resolvió el 6 de enero tras 29 días de reclamos, “se planteó – en un acta firmada en la
Subsecretaría de Trabajo
- que no habría represalias, ni descuentos, ni despidos y (se pactó) el pase a planta coordinada”.
La delegada denunció que “no se cumplió nada” y que “el 21 de marzo
Fernanda Lacoste
(subsecretaria de Relaciones Institucionales) y (el subsecretario de Trabajo)
Rubén Boris
dictaminaron que el conflicto de Lavalle es legal, y ahora echan a los chicos. Si es legal hay que cumplir las actas acuerdo, pero el señor
Gustavo Ortiz,
concejal electo, dice que ese papel no significa nada porque no es una resolución”.
Urquiza agregó que ayer estuvieron en la “Casa de Gobierno para que emitan la resolución, hoy la trajimos para que reincorporen a los chicos y nos dijeron que ‘no’. Queremos una respuesta, el intendente nos se encuentra, necesitamos hablar con quienes firmaron pero ellos dicen que no pueden tomar ninguna decisión, por tanto
Lavalle vuelve a estar en estado de alerta y movilización permanente".
Pero fue más dura al denunciar que Lavalle “es tierra de nadie y las leyes responden al patrón de estancia que tenemos como intendente”.