Una decena de empleados de la Municipalidad de Guaymallén que todavía no cobran su sueldo desde noviembre ni aguinaldo intentaron entrar por la fuerza al edificio comunal. Para evitar inconvenientes, tuvieron que intervenir preventores, quienes lograron cerrar las puertas principales del lugar (por calle Libertad) antes de que pudieran ingresar todos los manifestantes hasta el cuarto piso.
Sin embargo, un grupo de ellos entró y un funcionario cercano al intendente Marcelino Iglesias salió a hablar con ellos. Durante la conversación, los trabajadores prometieron no generar incidentes.
En medio de ese contexto se tuvo que habilitar la puerta trasera de la municipalidad (por calle López de Gomara) para que pudiera salir la gente que estaba dentro de la comuna.
La nueva gestión busca normalizar el mal estado financiero que dejó la intendencia encabezada por el ex jefe comunal, Luis Lobos. De hecho, Iglesias fue hasta Casa de Gobierno para tratar de conseguir fondos y escuchar al ministro de Hacienda y Finanzas, Martín Kerchner, quien hoy informó que la Provincia podrá pagar el aguinaldo de los estatales con recursos propios "gracias al esfuerzo que realizaron todas las áreas de los ministerios".
Durante esa conferencia, el funcionario del Ejecutivo indicó que “se transferirán a los municipios una quincena completa de coparticipación", lo que implicará un alivio para las comunas.
En este sentido, Iglesias señaló que lo sucedido en la municipalidad se trató de un conflicto ajeno al problema salarial. Se refirió a los manifestantes: “Es una puja interna entre dirigentes de gremios y quieren tomar protagonismo”.