Un equipo de especialistas procura recuperar el estado natural de ornamentaciones y pinturas de las bóvedas de la iglesia catedral Nuestra Señora de Loreto, dañadas por el paso del tiempo y factores atmosféricos, especialmente la humedad.
El trabajo está siendo realizado por el equipo que integran el conservador de pintura mural y de caballete Miguel Ángel Soria (51), a cargo de la dirección técnica, con la colaboración de los artistas plásticos Pablo Marianetti y Federico Quiroga.
Las obras motivo de la intervención fueron realizadas por el artista italiano Luis Marsonet en 1928 (con apoyo de Bruno Brusadín), y tienen un gran significado dentro del patrimonio cultural de Mendoza, especialmente dentro del inventario de arte religioso. Obras del pintor italiano también se observan en varios templos, entre otros la iglesia de la Merced.
La superficie a intervenir consiste en ornamentaciones y colecciones iconografías, y conforman la decoración de la cúpula, naves central y laterales del templo de calle José Federico Moreno y Lavalle, que acredita más de 125 años. Ahora se va a trabajar sobre las naves de los 2 costados.
Los daños, según refirió Soria, son muy diversos, y van desde el envejecimiento natural de los materiales, las filtraciones de las lluvias a consecuencia de defectuosos desagües y también por efecto de agentes externos de origen atmosférico y biológico.
Sin mencionar las intervenciones de la mano del hombre poco afortunadas y la consecuencia de algunos arreglos efectuados, ya que se trata de una edificación muy antigua, castigada por sismos e incendios. Es lo que ocurrió con el muro norte, que fue reemplazado con vigas, columnas y arcos, lo que en parte alteró las pinturas ubicadas allí.
Las realizaciones del pintor peninsular se encuentran en las bóvedas, aplicadas sobre material suspendido de madera y yeso. Este material es el soporte de las iconografías y las ornamentaciones (en forma de guardas geométricas y guirnaldas).
En la nave central se suman las imágenes religiosas, siendo la principal una composición de la Virgen de Loreto, que relata su historia en un pueblo italiano y que se observa enmarcada por un soporte hexagonal. Asimismo, en esta parte, el sector central, hay ángeles y otras figuras.
Los deterioros están a la vista, pese a que se encuentran en altura, a por lo menos 10 metros.
Por eso los artistas trabajan sobre andamios, con arneses y cascos, por razones de seguridad.
Asimismo no faltan fisuras, agrietamientos y pequeños desplazamientos de los soportes de mampostería, originados en los diferentes sismos que soportó la estructura.
"El agua ha dañado las pinturas, alterando los colores y las formas y nuestra labor consiste en completar la parte 'visible del proyecto, y reintegrar las 'lagunas' (vacíos estéticos), tarea que nos a tomará por lo menos 45 días", explicó Soria.
Habrá que señalar que en 1999, siendo cura párroco de la iglesia el padre Ricardo Quercetti, se intentó preservar este legado artístico-religioso, atacándose las fallas de la bóveda del altar. El equipo de salvataje estuvo integrado por el propio Soria y Gabriel Santacroce, entonces de 40 años.
Sin embargo, el proyecto se interrumpió por la falta de presupuesto para llevarlo a cabo y se ha retomado este año. La etapa en ejecución actualmente se hace con el mecenazgo de un empresario mendocino, y con el apoyo del actual párroco Aldo Vallone.
El especialista Miguel Ángel Soria dio precisiones sobre la recuperación: "Ahora estamos en el tramo de la limpieza superficial en seco, que consiste en extraer el asentamiento de polvo, partículas de dióxido de carbón y hasta telarañas. El siguiente paso será avanzar sobre la restauración propiamente dicha".
La tarea mayor consistirá "en la restitución de los soportes (de yeso y madera), y luego reintegrar solamente las zonas desaparecidas (de las pinturas), aclarando que el original queda intacto y solamente hay una incursión en las zonas de 'lagunas', que son las áreas que se han perdido. Limpiamos y consolidamos".
Las imágenes de la nave central, que como se ha expresado es una superficie sobre la que se avanzará en un futuro, no han sufrido grandes daños, únicamente deberán ser limpiadas y consolidadas.
Trepados en andamios, los recuperadores emplean, entre otras herramientas, aspiradoras, aerógrafo (para aplicar pigmentos), pinceles, pinceletas, espátulas, lupas.
El equipo aseguró que planea dejar concluida esta restauración inicial antes de la próxima Semana Santa.
El autor
Luis Marsonet nació en Udine (Italia), donde hizo estudios de decoración y pintura. En 1925 se radicó en Mendoza y 3 años más tarde se abocó a la decoración de Loreto, ayudado por su amigo Bruno Brusadín, con quien compartirá varias obras en el futuro.
En 1934 el dúo de artistas realizó obras de arte religioso en el templo de la Merced (con los años restauradas por Miguel Soria y Adelina Tarditti).Vivió la mayor parte de su vida en una casa del carril Ozamis, esquina Lavalle, donde llamaba la atención la pintura de la fachada del domicilio.
También decoró la parroquia Nuestra Señora del Carmen de San Martín, demolida en 1964. Marsonet murió en 1987, dejando un valioso legado artístico religioso, el cual debe ser preservado en su estado más auténtico.
