El valor de la lectura en la escuela

La decisión de la DGE de implementar veinte minutos de lectura diaria para los alumnos de nivel primario es una iniciativa valiosa.

El valor de la lectura en la escuela
El valor de la lectura en la escuela

La frase de la directora de Educación Primaria de la Dirección General de Escuelas, Valeria Rómoli, sostiene que "no hay aprendizaje sin lectura; esa es la clave". La misma sirve para sintetizar un serio inconveniente que se plantea en gran parte de los chicos y jóvenes que, llevados por la atracción de la nueva tecnología, no sólo cometen errores de ortografía, sino que no saben ubicar los signos de puntuación; muchos han modificado inclusive el lenguaje y lo más serio es que no saben interpretar los textos.

De allí que resulte más que importante la iniciativa de las autoridades de Educación, en el sentido de impulsar la iniciativa de establecer que los niños de edad primaria tengan 20 minutos de lectura obligatoria por día, dejando en manos de los docentes la forma y los textos para la aplicación de la medida.

Cabría comenzar indicando que se trata de un problema que no sólo afecta a niños y jóvenes de nuestro país y también destacar que es un tema que tiene sus años.

A modo de ejemplo podríamos remitirnos a lo señalado hace algunos años en España, donde se indicaba que "la gente cuyas edades oscilan entre los 15 y los 29 años no leen libros y los pocos que lo hacen leen 5 ó 6 libros al año como mucho; un 22 por ciento de los universitarios no leen nunca, entre otros aspectos, agregando que "el poco interés por la lectura está haciendo que nuestro conocimiento y vocabulario disminuya enormemente".

Destaca el estudio que "los jóvenes de hoy serán adultos el día de mañana y resultará difícil que retomen el hábito de la lectura".

Finaliza indicando que "no es que la lectura vaya a solucionar el problema que tienen muchos jóvenes del mal uso de las redes sociales, pero leer más ayudaría a que los jóvenes tengan una cultura más amplia y mejoraría la capacidad de comunicación y comprensión".

La situación es complicada porque gran parte del problema surge de las propias familias. Hoy es común observar que muchos padres, para mantener a sus chicos tranquilos, les dan el celular o una tablet para que jueguen, en lugar de darles un libro para que pinten o, participando del "juego", leyéndoles un cuento. Para muchos progenitores, el tema de la lectura es un problema "de la escuela" y no "de la casa", pero no lo hacen porque realmente lo sientan así, sino que lo adoptan por comodidad para no "perder tiempo" que pueden dedicar a "otros quehaceres". Así entonces, si los chicos leen mal o no interpretan los textos, la culpa es de la escuela o de la enseñanza, sin realizar una necesaria autocrítica.

De allí que resulte importante la decisión de la Dirección General de Escuelas de plantear que en todos los establecimientos escolares de nivel inicial tengan un espacio diario de 20 minutos diarios de lectura, partiendo de la necesidad de instalar "la comprensión lectora, que es la base de cualquier aprendizaje", agregando la funcionaria que la medida alcanzará a los estudiantes de primero a séptimo grado, "de la forma en que cada docente y colegio lo disponga y con libre elección de los textos y los libros", en una medida atinada en razón de que cada establecimiento podría adaptar la implementación a las necesidades de la zona en la que se encuentra.

Otro de los aspectos destacados se centra en el hecho de que la medida se implementará con un anticipo que comprenderá campañas con afiches y que permitirá "cubrir un déficit de expresión oral que se observa en varios alumnos de hoy", según se indicó.

En síntesis, la decisión de la Dirección General de Escuelas es importante y es de esperar que se concrete en los hechos lo más pronto posible.

Porque la lectura y la comprensión de textos es una de las "deudas" que tiene la educación por cubrir, en una situación que viene de lejos y que provoca inclusive que algunos dirigentes no suelen lograr comprensión en sus mensajes, por no saber respetar, entre otros aspectos, los signos de puntuación en la lectura correspondiente.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA