La innegable llegada de la mujer al mundo laboral a través del tiempo, siempre creciente (aunque sin preeminencia en puestos jerárquicos) instauró un nuevo mapa de ruta en el panorama laboral; que brindó -y brinda- a través de sus competencias una riqueza diferente a la de los hombres.
Si bien muchos especialistas sostienen que el mercado de trabajo ha reproducido y magnificado las diferencias sexuales, generando una tendencia a extender los hábitos hogareños en las mujeres (asignándoles tareas rutinarias y dejando a los hombres la dirección de los equipos y la toma de decisiones) las competencias femeninas y su aporte son de un inestimable valor, y una búsqueda importante por parte de las empresas.
La psicóloga laboral Viviana Imperiale (titular de la cátedra de Psicología Laboral en la Universidad del Aconcagua y disertante en diversos claustros académicos) aborda y aclara las competencias fundamentales para vislumbrar el grado de riqueza del mundo femenino, en el ámbito laboral.
Mujeres y trabajo
“Desde el Hay Group, se han realizado diversos estudios e investigaciones respecto al mundo laboral y las competencias femeninas. Lograron averiguar que una de las competencias que más sostienen las mujeres en el trabajo es la capacidad de empatía, es decir, la posibilidad de ponerse en el lugar del otro, como un valor desarrollado por sobre los hombres. Lejos de conflictos la mujer integra otras variables que por ahí el mundo masculino no tiene en cuenta en la resolución de problemas, y manejo de conflictos. De hecho, tiende a atemperar crisis en el ambiente laboral, algo que por ahí al hombre lleva a términos de enfrentamiento”, precisó Imperiale.
- El perfil emocional, biológico, de la mujer: ¿aporta al clima de trabajo?
- La mujer tiene mucho más permitido y estimulado culturalmente lo que es la parte emocional y sus demostraciones. Si bien esto está cambiando, definitivamente está más permitido en la mujer que en el hombre. El mundo femenino está más acostumbrado a ponerse en contacto con las emociones y a usarlas, En este sentido el rol materno influye muchísimo, ya que la mujer tiene más variedad de roles, y esta posibilidad de ejecución hace que también tenga una gran poder de adaptabilidad en el trabajo.
- ¿Qué desventajas pueden darse?
- Que haya más cantidad de mujeres subocupadas que de hombres, ya que tienen menor cantidad de tiempo porque también deben distribuirlo en otras funciones. Eso influye muchísimo.
- ¿Cómo manejan ellas las fortalezas y debilidades?
- Otra de las competencias que esta investigación sostiene es acerca del conocimiento sobre sí mismo del individuo. Las mujeres suelen tener mayor conciencia de sí que los hombres. Ellos son más prácticos y tienden a un objetivo, pero no a la profundización. El lado introspectivo es de la mujer. De esta manera conoce mejor sus fortalezas y debilidades, y más consciente. El hombre se arriesga más pero no sé si se toma el tiempo para poder realizar este proceso de introspección.
- ¿El aspecto estético es un requerimiento común en ellas?
- El tema de lo estético depende mucho del tipo de empresa de que se trate.
- ¿Cuál es el panorama de la mujer y los puestos jerárquicos?
- Si se da un 24% de ingerencia en puestos de alta dirección en ellas, es decir mucho. Sigue siendo mucha la diferencia en cuanto a los hombres y eso hace que no todas lleguen o tengan la posibilidad de alcanzar estos puestos, y por lo tanto desarrollar un sinnúmero de competencias. Las mismas tienen que ver con el grado de estudios. En general la mayor cantidad de mujeres no tienen un nivel de estudio o alcanzan lo básico y están sub ocupadas o en puestos muy operativos. Otras, que han logrado tener cierta capacitación brindan un porcentaje de su sueldo en ayudar a las otras entradas económicas del hogar.
Para estos puestos, la adaptabilidad, flexibilidad y dedicación full time son las variables que se manejan para competir al nivel de un hombre, con la consiguiente postergación de proyectos personales.
- ¿Cómo es el panorama de requerimiento laboral en las que son jefas de familia?
- El que una mujer sea jefa de familia también es algo que se busca y valora por parte de varias empresas, para determinados puestos, ya que le asegura a la misma que la mujer va a cumplir para poder mantener su hogar. A veces eso es una competencia requerida.
- En la actualidad, ¿pueden compaginarse trabajo y vida familiar?
- En Mendoza son pocas las empresas que contemplan la posibilidad de facilitar la coordinación de la vida familiar y laboral. De hecho, no está muy sólido el tema en la política y cultura de la organización.
- ¿Qué aspectos deben ellas resaltar en el CV?
- En el proceso previo deben tomar contacto con las competencias, es decir tomarse el tiempo de investigar y de revisar las capacidades que han ido adquiriendo. En general uno de los errores comunes es creer que las competencias están dadas sólo por los estudios, y se deja de lado que uno adquiere muchas de ellas a partir de otras experiencias. Entonces en la medida en que se revalorizan estas competencias (entendiendo el término en la actualidad como aquello que engloba conocimientos, habilidades, actitudes, puestas en acción, o habilidades desarrolladas o por desarrollar), más allá de lo académico, puede sumar una excelente alternativa que la empresa, puede llegar a tener en cuenta. Se tiene que revalorizar y aprender a redactar estos saberes-haceres en ese CV, que no siempre son laborales, pero que resultan más que importantes para muchas empleador.