Tras la amplia victoria del radicalismo frente al PRO en la interna de La Pampa, cada vez son más los referentes de la Unión Cívica Radical (UCR) que exigen un rol más protagónico en la coalición Cambiemos y quieren un precandidato de sus filas que compita con Mauricio Macri en las PASO presidenciales.
El domingo pasado en La Pampa, el diputado nacional radical Daniel Kroneberger cosechó el 66% de los votos en la interna con el macrista Carlos Javier "Colo" Mac Allister y ahora hay gestos que podrían dar lugar al recrudecimiento de la puja interna que tuvo lugar, aunque con resultados nulos para los radicales, en 2017.
Así, además de hacer campaña en un año duro para la economía argentina, ahora Macri deberá buscar la forma de contener a su propio frente electoral, integrado por el PRO, la UCR y la Coalición Cívica que lidera la diputada Elisa Carrió. En el Gobierno desdramatizan la derrota de Mac Allister. Para mostrar entereza, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, recibieron a Kroneberger en la Casa Rosada.
Tras ese encuentro, el presidente del PRO, Humberto Schiavoni, precisó que la conducción nacional del partido se reunirá el 11 de marzo en el predio porteño de Parque Norte para definir la estrategia de campaña. "El radicalismo se está despertando", expresó ayer el histórico dirigente radical Juan Manuel Casella y agregó que "La Pampa demostró la existencia de un partido radical unido, fuerte y que demuestra la vigencia de la UCR".
"Un partido silencioso, sin opinión, sin influencia en las decisiones del gobierno no sirve para nada", sentenció. Esta visión compartida por cada vez más dirigentes es un desafío para Macri y también para el gobernador de Mendoza y presidente del partido, Alfredo Cornejo, quien deberá evitar que la rebelión amenace la coalición y su rol como líder radical, aunque él también quiere un candidato propio en las PASO nacionales.
Casella, ex ministro de Trabajo de Raúl Alfonsín, no vaciló en sostener que el radicalismo debe tener un candidato presidencial propio para competir en las PASO y que esa figura debería ser Martín Lousteau. "Me parece que es la figura más visible, es joven, carismático y está bien formado", opinó.
El propio Lousteau, que viajó con Macri a la India y Vietnam, abonó esta idea al expresar que en el Gobierno "no debería haber miedo a competir en las PASO" aunque aclaró que todavía no tomó ninguna decisión sobre su eventual candidatura: "No importa quién sea el candidato. Pero no debería haber miedo a competir. Porque si alguien piensa que puede ganar la elección nacional, debería pensar que va a ganar la interna", agregó el economista. Macri leyó las declaraciones de Lousteau en Vietnam y le pidió tener una charla a solas antes de regresar a Buenos Aires, confirmaron a este diario fuentes cercanas al economista.
El objetivo del Presidente es que el ex ministro de Economía baje sus aspiraciones y compita en una interna con Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad. De esta manera se sumó a otras voces radicales que se expresaron en el mismo sentido. En declaraciones a Los Andes, Kroneberger dijo que su victoria en las PASO pampeanas marcó "un antes y un después" en la relación entre la UCR y el PRO, "porque durante todo este tiempo el radicalismo vino perdiendo protagonismo y no se le dio relevancia".