Con el rotundo éxito de la cinta “It”, la revista Vulture se animó a calificar, por su influencia en la cultura popular y su balance en las recepciones de los críticos cinematográficos, las cinco mejores adaptaciones de las novelas d Stephen King en la pantalla grande.
A continuación su top 3.
3). "La Zona Muerta", de David Cronenberg (1983).
Quizá la adaptación de King más subestimada sobre un director que ahora es de culto, aunque nunca dejó de serlo.
Este retorcido thriller se despliega sobre una simple premisa: "¿matarías a Hitler si pudieras retroceder en el tiempo?".
El maestro Johnny Smith (impecablemente interpretado por Christopher Walken), se despierta de un coma provocado por un accidente automovilístico y va descubriendo que, al tocar a las personas, puede revelar su futuro.
Asumiendo esta extraña habilidad, una vez se cruza con un candidato a Senador, Greg Stillson (Martin Sheen), y Johnny queda de una pieza cuando descubre al tocarlo que se convertirá en el destructor del mundo, en el dedo que hará volar a todo el planeta con un Armagedón nuclear.
Hay un mérito que hay que reconocerle a Cronenberg por supuesto: el film tiene una atmósfera funeraria, una especie de resignación pre apocalíptica.
Johnny Smith comienza a comprender que millones de inocentes morirán, que la tristeza y la muerte dominarán el futuro.
Con los actuales cambios totalitarios en alza en estos momentos, vuelvan a verla, la cinta no ha perdido un gramo de vigencia.
2. "Carrie" de Brian De Palma (1976).
El director de "Doble de cuerpo", convirtió este libro en uno de los dramas adolescentes más singulares de su tiempo y al vez en una de las grandes películas de terror.
La actriz Sissy Spacek es soberbia como Carrie, la típica chica tímida de un pequeño pueblo, tan aterrorizada por la llegada de la menstruación como de su madre fanática religiosa (jamás olvidaremos la interpretación de la demoníaca Piper Laurie).
No obstante, más allá del shockeante clímax de la última media hora del filme, el terror no parece ser el centro de la narración.
En realidad, despojándola de ello, De Palma ofrece un eficiente drama adolescente. "Carrie" es sobre la paranoia de no encajar, es sobre una vida cotidiana sacudida por el temor de enamorarse, de ser reconocida, es sobre eso de intentar no sentirse un extraño, un perdedor.
La telequinesis es a penas una herramienta de superviviencia y King la utiliza despiadadamente para la venganza.
Inolvidable la escena final, como bonus track, en la que se ve a la supuesta amiga de Carrie White, Amy Irving, llevarle unas flores al derrumbe de la casa ahora convertida en su tumba y un segundo antes de dejar el ramo, Carrie salta del suelo para atacarla.
Esa escena no está en el libro, De Palma se la inventó y por eso, y por tanto de su cine, lo amamos.
1) "El resplandor" (The Shining), de Stanley Kubrick (1980).
Comencemos con el dato que Stephen King la odió y la sigue odiando.
En una entrevista en 2014, King ratificó: "No los entiendo", refiriéndose a la cantidad de fanáticos que tiene la cinta. "Pero obviamente la gente la ama. El libro está caliente, y la película es fría; el libro termina en fuego y la película en hielo ".
Pero hay que profundizar; el director Stanley Kubrick tomó la idea básica de la aclamada novela de King y la distorsionó. En lugar de una tragedia acerca de un hombre decente y defectuoso que se vuelve loco, Jack Torrance (Jack Nicholson), acá se transforma en un imbécil arrogante que sueña con la gloria literaria, arrastrando a su desdichada familia a un remoto albergue montañés, cuyo resultado no es otro que el asesinato.
Para muchos observadores más minuciosos, la cinta de Kubrick es el lado infernal de una comedia negra que satiriza la mediocridad de la vida de la clase media sin talentos para sobrevivir en una sociedad competitiva.
En el mundo del director, Jack es un pésimo ejemplo de padre, la madre siempre intenta ser alegre a pesar de su pesimismo y los niños ven mucho más que sus padres. Son de hecho, infinitamente más astutos.
Con su adaptación, Kubrick disparó a los espectadores a un tesoro de interpretaciones posibles, muchas de las cuales se recopilaron en el maravilloso y laberíntico documental "Room 237", de Rodney Ascher, de 2012 (imperdible de principio a fin).
¿Es probable que Kubrick haya logrado mejorar sustanciosamente el material original literario? Muchos, creen y creemos que sí.