El gol de Correa para Godoy Cruz
El primer gol de Rocha para Gremio
El segundo gol de Rocha para Gremio
Con la frente en alto. Así se despidió el Tomba de la Copa Libertadores 2017. Después de conseguir por primera vez el ingreso a octavos de final tras una gran fase de grupos, Godoy Cruz se topó con el poderoso Gremio de Porto Alegre, que se impuso en los dos encuentros (1-0 en Mendoza y anoche 2-1 en Brasil) y acabó con la ilusión del pueblo bodeguero.
En el análisis final de la llave habrá que quedarse con todo lo bueno que hizo el equipo ante uno de los más serios candidatos al título. En la ida terminó abajo por la mínima diferencia tras un error antes del primer minuto, aunque después tuvo sus chances para al menos haber empatado. Anoche, no fue la excepción. En Brasil, tuvo un arranque fantástico y con un golazo de Javier Correa desde afuera se aferro al milagro, pero otras dos equivocaciones puntuales fueron letales.
Desde el sorteo mismo de octavos se sabía que la pelea con Gremio tenía muchas diferencias. Uno, dos veces campeón de América y con un plantel repleto de figuras. Otro, con mucho hambre de gloria, pero claramente inferior en todo sentido. Sin embargo, los jugadores fueron verdaderos leones para equipar esas diferencias y pagar cara la derrota.
Además, el cronograma argentino terminó siendo otro factor determinante. Con apenas un encuentro amistoso tras la pretemporada, el Tomba sufrió la falta de rodaje y Gremio se aprovechó de esta situación. A pesar del arranque flojo, terminó marcando claras diferencias el elenco de Renato Gaucho.
El buen arranque de Godoy Cruz sorprendió al Tricolor. Con una presión alta y asfixiante, el elenco de Mauricio Larriera salió a marcar la cancha de entrada, como lo había anticipado. En menos de 10’ ya había tenido dos chances claras y en la tercera no falló: Javier Correa marcó un golazo desde media distancia y silenció al Arena do Gremio, para el delirió de los más de mil hinchas del Expreso que viajaron a Brasil.
El equipo no se quedó y siguió buscando. Pero enfrente no estaba cualquier rival y herido, adelantó sus líneas y comenzó a jugar más cerca de Burián. Precisamente, el arquero uruguayo que debutó anoche, fue clave en el empate de Gremio. En su intento por embolsar el balón dio un rebote tonto, que aprovechó Lucas Barrios para habilitar a su compañero Pedro Rocha que solo tuvo que empujar al gol. Un duro golpe para el Tomba, que lo sintió y le costó reaccionar.
En la parte final, con el 1-1 parcial Godoy Cruz debía seguir buscando. La derrota en Mendoza (0-1) lo tenía contra las cuerdas. Y en esa búsqueda frenética por buscar el gol, el partido se hizo más abierto, de ida y vuelta y en donde Gremio mejor se sintió. Con más espacios en el ataque, aprovechó una mala salida en un lateral a favor y de contra, otra vez Pedro Rocha anotó su nombre en la estadística.
Otro mazazo del que no pudo recuperarse Godoy Cruz. De todas formas, siguió intentando, pero ya sin la fuerza y la frescura de los primeros minutos. Con la ventaja Gremio dejó escapar el tiempo y terminó eliminando al Tomba. Un Godoy Cruz que se despidió con la frente en alto y demostrando que en el fútbol, al final siempre terminan siendo once contra once a pesar de las enormes diferencias. Una Copa Libertadores para guarda y recordar por muchos años. Otra página de historia que escribió el Expreso.
