Ganar de visitante sigue siendo el gran karma de este Godoy Cruz en la Superliga. El equipo dirigido por el uruguayo Mauricio Larriera igualó 1-1 con Olimpo en Bahía Blanca y la racha sin victorias se estiró a cinco juegos en esta condición.
Sin embargo, tras un primer tiempo para el olvido, el equipo reaccionó y al menos rescató un punto en el complicado Carminatti.
La estadística decía en la previa que además en esta cancha nunca pudo vencer y la misma no pudo romperse. Pero esta vez, el máximo responsable fue el arquero mendocino de Olimpo, Adrián Gabbarini, quien con un par de tapadas fantásticas le negó la chance de llevarse los tres puntos a Mendoza.
Pero para explicar el porqué del 1-1 bastará con decir que Godoy Cruz regaló completamente el primer tiempo. No solo obsequió el gol de Troyansky (error de Burián), que llegó desde un lateral de la mitad del campo, sino que estuvo atado, sin fluidez y principalmente no comprendió cómo jugarle a un inofensivo equipo local.
Los de Forestello, quizá conscientes de sus limitaciones, le cedieron la salida limpia a Tomás Cardona y Diego Viera, pero una vez que se acercaban los defensores al mediocampo con la pelota al piso eran presionados y terminaban con un pelotazo a la deriva o perdían el balón y quedaban mal parados.
Encima, “Tonga” Giménez y Pol Fernández, cerebros del equipo, no la encontraban y cuando lo hacían, la perdían con facilidad. Por las bandas tampoco Ángel González y Felipe Rodríguez eran una solución y al igual que el resto de sus compañeros cayeron en la imprecisión.
Sólo el Morro García entendió qué hacer, pero estaba solo y era absorbido por la marca. Ramis no encontró su posición y lejos estuvo de ser la solución que esperaba Larriera.
En la parte final la reacción fue de menor a mayor y después de los quince minutos el desarrollo cambió completamente. El equipo encontró todo lo que no pudo en los primeros 45 minutos y fue creciendo de tal manera que llegó al empate y acarició el triunfo en un par de situaciones.
Pol y Giménez ganaron en confianza y fueron los que iniciaron las jugadas de peligro. Angelito González se hizo un festín por izquierda y el ingreso de Correa le dio más espacio en ataque al Morro García, quien avisó en un par de ocasiones y terminó convirtiendo el 1-1 después de una linda jugada colectiva.
Después, Gabbarini fue el único responsable de evitar el triunfo tombino. El exarquero de Guaymallén, Independiente de Avellaneda y Newell’s, entre otros equipos, se lució ante un remate a quemarropa de “Pipe” Ramis, después la descolgó del ángulo ante el pifiado tiro de Viera y sobre el final, ahogó el grito de Javier Correa, que definió cruzado pero encontró la mano del portero. Brillante lo de “Gabba”.
El punto no le sirve demasiado a Godoy Cruz. Antes de este partido, Larriera había dicho que el objetivo era romper la racha de visitante y sumar los 9 puntos que le quedan en juego al Tomba de acá al 1 de diciembre.
Ayer, el DT uruguayo se la jugó con un equipo bastante ofensivo (sacó a un volante de contención como Fabián Henríquez para incluir en el equipo a Victorio Ramis) y proponer un 4-2-4. Sin embargo, Olimpo lo sorprendió en el primer tiempo y en el complemento se vio un Godoy Cruz más parecido a la idea que busca Larriera.
Dentro de dos días, este jueves, tiene otra prueba de fuego ante Vélez para salir de la malaria de visitante.