Representantes del SUTE reclamaron hoy en Casa de Gobierno por tres puntos: la revisión tardía de las licencias por cambios de funciones de los docentes, la apertura de paritarias de administrativos docentes que trabajan en ese edificio y por la ropa de trabajo para celadores, que aún no ha sido entregada según el gremio.
El SUTE planteó - otra vez - que el polémico ítem aula está mal desarrollado y mal llevado a cabo desde el principio.
Este reclamo deviene del reciente anuncio que hizo la Dirección General de Escuelas de que revisará los 3.200 cambios de funciones. A raíz de este censo el Gobierno determinará quiénes están aptos para volver a dar clases y quiénes desde agosto empezarán a cobrar el cuestionado ítem: estos últimos serán quienes no estén frente al curso pero sí desarrollen su labor en la escuela.
Desde la DGE, Gabriel Sciola, director general de administración, y Francisco Fernández, responsable de de Auntos Jurídicos, recibieron el petitorio de los manifestantes y les solicitaron que volvieran la semana que viene para ofrecer una respuesta.