El escrutinio provisorio de las elecciones del SUTE se cerró en la madrugada de ayer, con 19 mesas observadas. Con esta información, una lista se proclamó como ganadora, mientras que la otra sostuvo que todavía se puede revertir el resultado, teniendo en cuenta que sólo hubo 94 votos de diferencia entre ambas, sobre un total de más de 15 mil votos.
Lo cierto es que en la madrugada de ayer, pocos durmieron. Por un lado, la Lista Marrón, que encabezó Sebastián Henríquez, festejó toda la noche el "batacazo" y en la mañana de ayer ratificó que es la nueva conducción del gremio docente.
Pero la lista Azul Naranja, que propuso a Graciela González, trabajó toda la noche para presentar una impugnación por cinco mesas en las que detectaron irregularidades.
“Nosotros pedimos que se repita la elección. Si tenemos en cuenta los empadronados en sólo una mesa, se puede revertir el resultado por la escasa diferencias entre las listas”, anunció Gustavo Correas, secretario general de la CTA y uno de los líderes de esa lista, una escisión de la Celeste.
Lo cierto es que el lunes a las 9, la Junta Electoral que se conformó en el SUTE comenzará el recuento definitivo y decidirá si le da lugar a la impugnación de la Azul Naranja y a las observaciones propias, y repite así la elección en las mesas señaladas.
"En 2007 nos pasó una situación similar y se convocó a elecciones en 13 mesas. En aquel momento, demoró 15 días desarrollar una elección complementaria", recordó Correas.
En juego, está la conducción del sindicato más grande de la provincia, que desde 1998 es conducido por la Lista Celeste. "Queremos terminar con las reelecciones indefinidas", apuntó, a propósito, Henríquez.
El espacio oficialista -referenciado en el kirchnerismo- se partió y puso en competencia a la Lista Celeste (que quedó en tercer lugar con su líder histórico Gustavo Maure como candidato) y a la Azul Naranja, que tenía el apoyo del actual titular del gremio, Adrián Mateluna. Así, el resultado se dividió en tres y, por el medio y para sorpresa de todos, pasó la Lista Marrón (la FURS), vinculada a la izquierda.
No obstante, la diferencia de 94 votos entre Henríquez y González ahora será revisada por la Junta Electoral gremial.
Según explicó Correas, las irregularidades que ellos detectaron fueron cinco. Por un lado, hubo una “urna volante” en Lavalle que no cumplió el orden del recorrido de las escuelas que se había previsto de antemano. En Guaymallén, hubo 28 votos observados y en Las Heras no coincidieron la cantidad de firmas con la de sobres. En Tupungato no coincidió el nombre de algunos votantes con los empadronados, mientras que en Maipú se agregaron personas al padrón con lapicera. Todo esto, según los fiscales de la Azul Naranja.
Según contó el titular de la CTA, de repetirse el proceso habría alrededor de 350 empadronados que votarían de nuevo. “Es una elección que todavía no está terminada”, insistió Correas y anticipó que, de comprobarse que ganó Henríquez, lo reconocerán como ganador.
En cambio, el titular de la Lista Marrón sostuvo lo contrario: “Hay mesas impugnadas pero los números indican que aunque se dieran curso a las impugnaciones, en todos los resultados quedamos arriba por más o por menos votos. En ese sentido, ya nos podemos proclamar ganadores”.
Henríquez llamó a la unidad del gremio docente
El próximo conductor del SUTE, Sebastián Henríquez, sabe que la cantidad de afiliados que lo votaron no es representativa en el universo de empadronados, por lo que su primera tarea al frente del gremio será “seducir” al resto.
“Nuestra principal preocupación es convocar a los miles de trabajadores a sumarse al sindicato. No podemos perder de vista que sólo la mitad del conjunto está afiliado al sindicato y que votó el 60% del padrón. Nos interesa entrar en diálogo con esos miles de escépticos, necesitamos un sindicato fuerte. Esta es la primera tarea”, definió Henríquez.
El conductor, atento a las divisiones en otros gremios, como ATE, o la intervención del gremio de Judiciales, pidió la unidad en el SUTE.
“El SUTE ahora no es el de la izquierda, sino de los trabajadores de la educación. Hay que ser prudentes y llamo a los compañeros de la Azul Naranja a que sean responsables. Hubo una Junta Electoral que dio un mensaje claro y si durante todo el proceso electoral no se hicieron denuncias, o se hicieron en voz baja pensando que se iba a ganar y cuando perdemos salimos con denuncias, el mensaje es confuso. Hay que tener la grandeza de aceptar la derrota, es una contradicción que cualquier lista que se pretenda oposición al Gobierno, ahora quiera que el Gobierno dirima a través del Ministerio de Trabajo la interna del sindicato”.
Docente que fue echada asumirá en la conducción
El nombre de la docente mendocina Paola Vignoni volvió ayer a cobrar relevancia en el ámbito educativo. El año pasado fue echada por cuestionar y oponerse al Operativo Aprender y ahora forma parte de la nueva conducción del sindicato docente.
Como parte del Frente de Unidad por la Recuperación del SUTE (FURS), identificado con la izquierda, Vignoni asumirá al frente de la Secretaría de Finanzas de la Seccional Guaymallén. “Estamos emocionados, contentos porque después de 20 años de burocracia sindical en el SUTE, en el sindicato más grande de la provincia, para nosotros es un logro enorme de las bases”, dijo ayer a radio Nihuil.
La docente fue despedida por la DGE de la escuela N° 4-050 “Roberto Azzoni” de Guaymallén por demostrar “inconductas manifiestas” durante el desarrollo de las pruebas Aprender.
