El presidente de Paraguay, Horacio Cartes, a quien le quedan poco más de dos meses y medio de mandato, desistió de renunciar a su cargo, como intentaba hacer para poder asumir como senador activo en el Congreso.
"Me dirijo a Vuestra Honorabilidad para retirar mi renuncia al cargo de Presidente que he presentado en fecha 28 de mayo y que no ha tenido tratamiento en el Congreso Nacional", expresó Cartes ayer en una nota dirigida a la presidencia del Senado.
La elección de Cartes como senador en los comicios del pasado 22 de abril abrió una polémica en Paraguay, pues la Constitución contempla que los expresidentes serán senadores vitalicios, con voz pero sin voto.
Para facilitar su investidura parlamentaria, Cartes intentó renunciar antes de terminar su mandato, pero no logró quórum para que el Congreso considerase el punto.
"Veo con gran pena que algunos legisladores no desean que se cumpla la voluntad popular del 22 de abril, por lo que retiro mi renuncia", sostuvo el mandatario en su cuenta de Twitter.
Cartes había sido el más votado de los candidatos a senadores. "Lamento que entre colorados no pudimos llegar con una bancada unida al próximo período", insistió Cartes.
La oposición y un grupo de parlamentarios del gobernante partido Colorado que apoyan al presidente electo Mario Abdo Benítez se negaron a tratar la dimisión de Cartes.
El exmandatario Fernando Lugo, presidente del Congreso, convocó para el juramento de rigor, este sábado, a 45 senadores y 80 diputados electos, quienes asumirán al día siguiente por un período de cinco años.
La Corte Suprema de Justicia y el Tribunal de Justicia Electoral habían autorizado a Cartes a postularse como senador activo, al igual que al expresidente Nicanor Duarte (2003-2008).
Sin embargo, Lugo informó el lunes que ni Cartes ni Duarte fueron llamados a jurar.
Quienes se opusieron a Cartes hicieron prevalecer un artículo de la Constitución según el cual los presidentes salientes “serán senadores vitalicios”, con voz pero sin voto. Otra disposición establece que el presidente no puede ostentar dos cargos al mismo tiempo.
El senador Darío Monges, en representación de Cartes, dijo a periodistas que “una vez que deje de ser presidente (Cartes) debe incorporarse al Congreso”.
No obstante, la nueva conformación del legislativo sería aún más desfavorable para que Cartes intente reclamar su banca, señalaron opositores que celebraron la decisión.
"Todos tenemos que respetar la Constitución", dijo el ministro del Interior designado para el futuro gobierno Ernesto Villamayor a la edición digital del diario ABC.
La primera Asamblea Constituyente de la democracia prohibió en 1992 la reelección presidencial y que los exmandatarios puedan aspirar a otros cargos políticos.
Hasta ahora, solamente el izquierdista Fernando Lugo ocupa un escaño como senador activo, debido a que no completó su período de gobierno porque fue destituido en 2012, catorce meses antes del fin previsto de su mandato.
Se cae la posibilidad de una primera mujer presidenta
El anuncio de Horacio Cartes de retirar su renuncia a la Presidencia echa por tierra la posibilidad de que la vicepresidenta, Alicia Pucheta, asuma la Presidencia hasta el 15 de agosto, cuando lo hará el Gobierno de Mario Abdo Benítez.
Pucheta, de 68 años, y que había renunciado como magistrada de la Corte Suprema a primeros de mayo, fue después designada vicepresidenta por el Congreso, la primera mujer en ocupar ese cargo.
Eso allanaba su camino a ser la primera presidenta de Paraguay en cuanto Cartes presentara su renuncia a seguir desempeñando como jefe del Ejecutivo, la cual presentó el 28 de mayo y apoyó con un mensaje televisivo a la nación.
De hecho, antes de presentar su renuncia, Cartes expresó su deseo de que Pucheta fuera elevada a la Presidencia.