El podio construido en silencio

Fernando Consorte y su preparador físico, Federico Rama, juntos desde 2007, han logrado, entre otros títulos, dos subcampeonatos mundiales.

El podio    construido en silencio

El regreso a casa fue algo más relajado, más allá de los embarques de sus equipos y de los trasbordos forzados, Fernando Consorte (ARG 355) arribó a Mendoza sabiendo que el Subcampeonato Mundial Master que logró -el fin de semana pasado- en Riga (Letonia), abrió un nuevo círculo en su carrera deportiva, confirmando su crecimiento, ratificando su vigencia entre los mejores windsurfistas de la clase Raceboard.

El timonel, que en 2011 en la bahía de San Francisco también logró el segundo escalón del podio en el Mundial Master, logró un puesto que marcó un hito para la Asociación Mendocina de Windsurf (AMW). Porque es un año especial, porque el título ecuménico se suma a la primera representación local en un Juego Olímpico.

Pero este momento, que no escatima en brillo, para Fernando Consorte comenzó a gestarse en silencio en 2007, luego del Mundial de Raceboard que se celebró en las aguas del Dique Potrerillos. “No sabía nada del deporte, con el tiempo fui aprendiendo sobre algunos detalles técnicos que me permitieron mejorar los gestos de entrenamiento. Pero en ese entonces, él llegó al gimnasio y me contó cuál sería su plan”, cuenta Federico Rama.

El preparador físico es el hombre detrás de bambalinas...  el socio silencioso de las grandes campañas internacionales del windsurfista de Luján.

“Hemos trabajado durante mucho tiempo buscando el equilibrio para ganar velocidad, tratando de encontrar la puesta a punto correcta para que Fernando desarrollara su potencial con poco o mucho viento, ganando musculatura, perdiendo peso”, sostiene el responsable del gimnasio Profit.

“El subcampeonato Mundial es muy importante para mí en lo personal porque significa un gran estímulo para mi carrera deportiva. También representa todo el apoyo que he recibido y el esfuerzo que realizaron para acompañarme en este proceso”, le confesó a Más Deportes Fernando Consorte. “Estar allí, competir con ex representantes olímpicos y ganar regatas, además de una tranquilidad, renueva el compromiso que asumís, te impulsa a planificar nuevos objetivos: quiero ser campeón del mundo”,

“A lo largo de estos años, siento que gané mucho en experiencia, además de respeto como corredor. En el circuito internacional los mendocinos fuimos ganando un lugar muy especial, por las mismas dificultades que implica llegar a los sitios donde se disputan los campeonatos”, señaló el team rider de las firmas Starboard (tablas) y Severne (velas).

“Cambiar de equipo significó también dedicarme el doble a la parte física y también navegar los fines de semana en Potrerillos fuera de temporada. Trato de nunca bajar los brazos y de luchar hasta el final”, detalla el lujanino, y agrega): “Este logro también es resultado de la dedicación de mis amigos para seguir navegando y levantando el nivel, para hacer más reñidos los torneos de la AMW”.

“Potrerillos nos ha ayudado a que nos conozcan, a que vengan timoneles de afuera y el roce de la competencia es fundamental para que uno siga progresando”, puntualizó Consorte. Mientras que Rama finalizó: “Debimos aprender mucho, reeducarnos hasta en la forma de comer para no dejar detalles librados al azar”.

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