El PJ ya muestra su distancia de Cristina

Ayer, senadores y diputados “de los gobernadores”, comenzaron a armar en solitario su estrategia en torno a la discusión del Presupuesto. El rol de Massa.

El PJ ya muestra su distancia de Cristina

El peronismo dio ayer la primera señal fuerte de reorganización hacia 2019, sin Cristina Fernández. Fue por la tarde, en el despacho de Miguel Pichetto. Allí estuvieron senadores de su bloque, como el tucumano José Alperovich y el bonaerense Juan Manuel Abal Medina; el gobernador de La Rioja, Sergio Casas y diputados del Bloque Justicialista (BJ), que responde a los gobernadores y tiene como referente a Diego Bossio, presente en el encuentro. La formalidad del encuentro fue fijar la estrategia para discutir el Presupuesto 2018 en el Congreso. Pero, de fondo, se trató del primer aviso de que en el PJ no hay lugar para Unidad Ciudadana.

La gran foto será el miércoles 25, tan sólo tres días después de las elecciones, cuando se reúnan los gobernadores del PJ en el Consejo Federal de Inversiones (CFI), ubicado en Retiro. Eso también se acordó en el despacho de Pichetto. A ese encuentro será invitado el líder del Frente Renovador, Sergio Massa.

Ese día los gobernadores empezarán a presionar a Cambiemos para reactivar la discusión parlamentaria del Presupuesto y de todo el paquete de leyes económicas (impuesto al Cheque y Responsabilidad Fiscal más Fondo del Conurbano Bonaerense). Pero esa cumbre en el CFI también será la presentación del nuevo “equipo del PJ”, ya sin el liderazgo de Cristina.

La caja de resonancia de los reclamos de los gobernadores serán, en el Senado, el bloque del PJ que conduce el rionegrino Pichetto, y en la Cámara de Diputados, el Bloque Justicialista, que tiene 17 integrantes y esperan que se amplíe tras las elecciones a “un piso de 35”.

En el Bloque Justicialista no descartan que algunos diputados del Frente para la Victoria-PJ que tienen mandato hasta 2019 y responden a gobernadores provinciales, den el salto. Afirman que trabajan para que el resto del peronismo no kirchnerista de la Cámara baja, de Córdoba, Santiago del Estero o Misiones, también se sume, si no al bloque, al menos a un interbloque.

En este futuro interbloque podrían anotarse los diputados de Massa, quien finaliza su mandato en diciembre pero seguirá teniendo predicamento sobre un bloque de 20 integrantes.

Por caso, el massista Marco Lavagna ya está trabajando junto a Bossio y los diputados del Bloque Justicialista en el Presupuesto 2018.

Al respecto, los diputados y senadores justicialistas acordaron ayer plantarse frente al Gobierno en la discusión de la ley de leyes, que entró como cada año el 15 de setiembre pasado y desde entonces se encuentra sin avances en la comisión de Presupuesto y Hacienda, que preside el macrista Luciano Laspina. Dicen que la parálisis es porque hay muchos legisladores en campaña. Entre ellos, el mismo Laspina, que busca ser reelegido en Santa Fe.

Quejas

Los diputados del Bloque Justicialista anticiparon que hoy mismo, durante su exposición en el recinto, plantearán al jefe de Gabinete, Marcos Peña, sus quejas por la no realización de obras pedidas por los gobernadores. Denuncian que hay un atraso del 90% y que las obras que están ejecutándose son todas continuidades de las presupuestadas por el gobierno de Cristina.

Además, dicen que 40% de la ejecución de las obras se concentra en la Capital Federal y la provincia de Buenos Aires.

“Vamos a cuestionar que se consolide este centralismo. En el Presupuesto de este año que ya termina hay obras que ni empezaron. La inversión real en las provincias muestra una disminución de 5 puntos porcentuales”, dijo ayer el diputado salteño Pablo Kosiner, que responde al gobernador Juan Manuel Urtubey, uno de los presidenciables del nuevo PJ no kirchnerista.

El justicialismo cuestionará la discrecionalidad con que el Gobierno central distribuye los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), en beneficio de los macristas Horario Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal, y pedirá por el impuesto al Cheque. También reclamarán definiciones sobre la reforma impositiva, anunciada pero cajoneada en la Casa Rosada.

Además, elevarán su preocupación por el endeudamiento: estiman que pese a la salida del default, apoyada por la oposición, la deuda total sobre el PBI creció en dos años del 50% al 58%.

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