El viernes hubo una invitación. El gobernador Alfredo Cornejo dijo que esperaba hoy a la dirigencia del PJ para interiorizarse sobre las cuatro obras que espera dejar listas para que inicie el próximo gobierno y los créditos que asegurarán que la plata esté disponible para realizarlas. Pero en el PJ reina el silencio.
Parece que nadie irá a Casa de Gobierno a tomarse un café con el Gobernador. Las usinas del peronismo dicen que no hubo una invitación oficial, que nadie recibió tal convite.
El viernes, durante el acto de inauguración parcial de las obras de la Terminal de Ómnibus, Cornejo lanzó la invitación ante la prensa: "El lunes pueden ir a Casa de Gobierno o pueden volver a ir mis ministros a la Legislatura y explicar proyecto por proyecto".
El apuro oficial es que el 2 de agosto vence el plazo para que el Gobierno firme los contratos con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para obtener el financiamiento destinado a la refuncionalización de la ruta 82, más conocida como la Panamericana, y para eso debe tener aprobado el endeudamiento por la Legislatura provincial.
Los endeundamientos necesitan el voto de los dos tercios de los legisladores de ambas cámaras y el oficialismo de Cambia Mendoza no reúne esas voluntades.
En el PJ la decisión parece ser un no cerrado, a pesar de que públicamente dicen que quieren analizar proyecto por proyecto.
Eje de campaña
El deseo del peronismo es hacer foco en el nivel de endeudamiento de la provincia, en momentos en que el PJ cree que el país está a punto de explotar. Más endeudamiento en dólares, en la mirada de esa fuerza sería una locura.
El tema de la deuda es uno de los ejes de campaña del espacio, el otro es la delicada situación económica que se vive en Argentina.
En el partido de la oposición hace foco en que Mendoza ya tiene casi 57.000 millones de pesos de deuda, de los cuáles la gran mayoría los tomó esta gestión, aún cuando olvidan que buena parte de esa deuda fueron los 500 millones de dólares que el principal partido de la oposición acordó con Cornejo antes de asumir, para pagar todas las obligaciones que dejó Francisco Pérez sin pagar. Esos quinientos millones de dólares hoy representan poco más de 21.000 millones de pesos, un monto que creció en pesos por la devaluación que se desató en abril del año pasado.
Luego Cornejo tomó deudas por alrededor de 10.000 millones de pesos con el Gobierno nacional, de los cuáles casi $4.500 millones de ellas se coparticipan a los municipios, como es el caso de la acordada en 2016, que ingresó en el paquete por la devolución del 15% de la coparticipación nacional que era retenida por la Anses.
Hay otros 8 mil millones con el Banco Nación y 152 millones con el BICE por el tercer helicóptero policial, una compra que inició la gestión de Francisco Pérez, pero que nunca pudo concretar.
Por último hay algo más de 9 mil millones de pesos correspondientes a programas de organismos multilaterales de crédito, la gran mayoría con el BID y con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF).
De estos créditos, Cornejo sólo tomó 188 millones de pesos con el BID; el resto del dinero todo fue tomado por los gobiernos de Celso Jaque y Francisco Pérez.
Del otro lado, en el Gobierno hablan de palos en la rueda del desarrollo. Y apuntan a la interna del PJ que no resuelve el liderazgo interno.
Sin embargo fuentes del PJ sostienen que en la reunión del jueves pasado en el Hotel Cervantes (donde se decidió la rechazar el endeudamiento) nadie levantó la voz para defender los endeudamientos que pide el Gobierno.
El tema es que hace algunos días sonaba la chance de que un sector de la fuerza de la oposición podría aceptar dos de los cuatro tramos de endeudamiento: los dos que eran otorgados por el BID (ruta 82 y la Gestión Integral de los Residuos Sólidos Urbanos, es decir el tratamiento de la basura), mientras que los otros dos, correspondientes al Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional (Fffir) que están destinados a la doble vía de acceso a Junín y Rivadavia y al acueducto ganadero de La Paz.
La explicación que daban discretamente en los mentideros, es que los créditos del BID son realmente ventajosos, mientras que los del Fffir, tienen una tasa más elevada.
De todos modos, todas esas versiones se acallaron después de la reunión del jueves, en la que el PJ decidió el rechazo.
Claves
-El Gobierno pide deuda.Para financiar cuatro obras: la refuncionalización de la Panamericana hasta Cacheuta y la gestión y reciclado de basura; el acceso a Rivadavía y Junín y el acueducto ganadero La Paz.
-130 millones de dólares. U$S75 millones los pone el BID (Panamericana y reciclado de residuos) y U$S55 millones los pone la Nación (acueducto, acceso Junín-Rivadavia y 30 millones para contrapartida provincial para las obras BID).
-Rechazo peronista. El jueves el PJ se reunión en el Hotel Cervantes y decidieron rechazar pedido.