En un mundo que explota por el impacto del coronavirus, sin soluciones claras, con decisiones y discursos contradictorios dentro de cada país, Mendoza debe sobrevivir. El peronismo provincial cree tener una receta, que es en realidad una vieja fórmula a la que suele apelar: la creación de un Consejo Económico y Social.
El reclamo coincide con el que algunos sectores empresarios le hacen al propio Gobierno nacional, que había prometido una ley para crearlo pero quedó frenada cuando comenzó la crisis por la pandemia.
Acá es el Frente de Todos el que lanza la idea y ya lo dejó entrever en un comunicado que difundió hace unos días, cuando se aprobó la emergencia pedida por el gobernador, Rodolfo Suárez. Ese texto detalla que debe convocarse a todos los sectores políticos, empresarios, gremios, referentes sociales, científicos y sanitaristas, entre otros.
Una figura de la primera línea del PJ mendocino fue clara sobre los objetivos: "Hay que escuchar a todos y de ahí debe salir un plan, dejando las miserias de lado. No tiene que haber grieta entre lo público y lo privado".
El apuro justicialista se debe a que saben que una vez que la urgencia de la pandemia empiece a declinar y la de la economía crezca, se va a entrar en el clima preelectoral de 2021, que va a dificultar cualquier acuerdo.
"Hay que avanzar ya y establecer un plan, donde conste el apoyo de cada uno para que después nadie pueda dar marcha atrás o abrirse. Así, si todos quedamos con los 'dedos marcados', vamos a avanzar e incluso va a salir fortalecido el Gobernador", remarcó.
El avance del coronavirus y las víctimas fatales que pueda dejar en la provincia es hoy la emergencia, pero el impacto en la economía ya es brutal, con empresas paradas, sueldos recortados o pagados en cuotas y miles de trabajadores informales sin ingresos.
El problema, como siempre, es de dónde sale el dinero. Sin trabajo no habrá consumo y sin consumo, el Estado no recaudará. Lo confirmó el Gobierno provincial cuando cerró los números de marzo, pese a que aún no impacta el efecto del aislamiento social en Ingresos Brutos.
Entre todos los números de la recaudación, hay uno que sorprendió en particular: el Inmobiliario, que dejó a la Provincia la mitad de dinero “real” (teniendo en cuenta la inflación) que un año antes.
En el oficialismo provincial descartan que la propuesta del Frente de Todos sea la salida. Y el primer argumento es que las herramientas de política económica que tiene la Provincia son ínfimas y su futuro está atado a los recursos de la Nación.
De ahí el proyecto del diputado nacional Alfredo Cornejo para que al presidente alberto Fernández reparta a las provincias, con el mismo criterio que la coparticipación, los ATN y gran parte de las retenciones a las exportaciones. Con ese dinero, se estima que se compensaría la caída de la recaudación de los próximos dos meses.
En definitiva, el pedido del ex gobernador busca que todos los recursos del Estado se coparticipen y aunque él no lo va a decir, eso incluiría a la ascendente emisión monetaria a la que apela cada día más el gobierno de Alberto Fernández para cubrir las cuentas estatales.
En el oficialismo provincial creen que hay mala fe del Gobierno nacional, al que acusan de enviar recursos a sus aliados solamente y de intentar "ahogar" a Suárez, uno de los apenas cuatro opositores que gobiernan territorios en el país.