El PJ se tomó apenas unos minutos para decidir que no acompañarán el proyecto de ley por el que el oficialismo pretende aumentar el número de miembros de la Suprema Corte de siete a nueve.
La jornada de ayer fue marcada por las reuniones; en la tarde, mientras el PJ anunciaba el resultado de sus deliberaciones, el PD venía con su encuentro demorado; pero la decisión peronista ponía presión. Al cierre de esta edición se supo que los demócratas dieron mandato a su legislador para que vote en contra.
El proyecto debería tratarse mañana en Diputados. La UCR y sus aliados de Cambia Mendoza tienen 25 de 48 escaños, pero uno de esos aliados, Guillermo Pereyra, ya adelantó que votará en contra.
El otro aliado, el demócrata Marcos Niven, no era tan tajante en el rechazo, pero sus palabras denotaban un deseo de votar en contra.
Hubo otra reunión a media mañana, en Casa de Gobierno. Estuvo Niven con el ministro de Gobierno, Dalmiro Garay, en un intento de sensibilizar al diputado, pero todo quedó supeditado a la reunión de última hora en la sede del PD.
En la reunión del PJ estaban legisladores provinciales y varios intendentes; apenas faltaron dos caciques comunales, el sanrafaelino Emir Félix y el maipucino Alejandro Bermejo, pero sí estaban los hermanos de ellos, Omar Félix (además presidente del peronismo) y Adolfo Bermejo.
En el Portal Suites las autoridades del justicialismo se demoraron más en debatir otros menesteres que el proyecto de ley del oficialismo.
Sin embargo, a las 19.30, el titular del PJ anunciaba por redes sociales: “Por decisión del consejo provincial del PJ, del bloque de diputados provinciales y con la presencia de los intendentes, no se acompaña el aumento de miembros de la Honorable Corte”.
El proyecto de ley que une al peronismo e incluso divide al bloque del oficialismo fue redactado por los senadores Juan Carlos Jaliff, Adrián Reche y Marcelo Rubio y pretende la modificación de la ley 4969, Orgánica de Tribunales. En esa norma se establece el funcionamiento de la Corte.
Entre las modificaciones, la más polémica es el incremento de de miembros de la Corte, llevándola de los actuales 7 supremos a 9. El máximo tribunal funciona con dos salas de tres miembros cada una, en la primera se resuelven casos del fuero civil y comercial, en la segunda las penales y laborales.
La propuesta de los senadores radicales es incrementar el número para que hayan tres salas de tres miembros con una exclusiva de casos penales y otra de casos laborales y así acelerar la resolución de expedientes que hoy colapsan a la actual sala segunda, al menos en la mirada oficialista.
Del lado del PJ crecen los temores, compartidos por el PD. Creen ver una intención del gobernador de copar la Corte, cosa que con los números actuales parece lejana; lo que no parece lejano es que si podría manejar los casos penales, que son la obsesión de Cornejo en su lucha contra la “mano blanda” que impera en la actual sala penal.
