El papa Francisco pidió hoy a la Curia romana, el gobierno de la Iglesia, "un cambio de mentalidad" profundo en el contexto de un Occidente que se descristianiza.
"íYa no estamos en la cristiandad, ya no lo estamos! Ya no somos los únicos hoy en producir cultura, ni los primeros, ni los más escuchados", lanzó el papa en su tradicional felicitación a la Curia.
"Ya no estamos en régimen de cristiandad porque la fe, especialmente en Europa, pero también en gran parte de Occidente, no constituye ya un presupuesto para convivir juntos. Peor aún, la fe es negada, burlada, marginada y ridiculizada", afirmó el papa argentino Francisco ante sus principales cardenales.
Ese "cambio de época" obliga a "un cambio de mentalidad pastoral", dijo el primer papa latinoamericano de la historia, que desde su elección en 2013 ha tratado de reformar las estructuras internas de la Curia.
Francisco advirtió asimismo contra "la rigidez" y la tentación de refugiarse en el pasado", en momentos en que se "han que llevar a cabo cambios significativos".
Un grupo de seis cardenales de la guardia cercana al papa Francisco está a punto de terminar a elaboración de una nueva Constitución que regirá el futuro de la Curia romana y que remplazará un texto precedente promulgado por Juan Pablo II en 1988.
El papa anunció este sábado, además, la limitación a cinco años, eventualmente renovable, del puesto de decano del Colegio de Cardenales, que preside esta instancia.
Con esta decisión parece querer disminuir el poder del decano, y este sábado aconsejó a los cardenales que eligieran una persona que no desempeñara simultáneamente otros puestos en el seno de la Curia.
Este cambio es anunciado al mismo tiempo que la dimisión del decano actual (en el puesto desde 2005), el cardenal italiano Angelo Sodano, de 92 años, que no es considerado como cercano a Francisco.