El Papa “siempre ha sido para mí un líder moral”, aseguró el presidente Mauricio Macri en una conferencia de prensa que dio en la Embajada argentina ante la Santa Sede, tras la audiencia con Francisco a la que llevó a su esposa Juliana y a tres hijas de ambos.
Macri dijo que esta vez el diálogo, que fue “bueno”, duró casi una hora y estuvo caracterizado por las coincidencias en cuanto a la lucha contra la pobreza, la necesidad de promover el trabajo y el crecimiento, y la necesidad de unir a los argentinos en una concertación social y política.
El Presidente se mostró contento e hizo algunos chistes. El mejor fue el siguiente: “Roma está llena de cordobeses que han venido por la canonización el domingo del cura Brochero. Los romanos no saben los riesgos que corren”.
Además de la parte final de la audiencia, consagrada al encuentro familiar de los Macri con el Papa, el largo diálogo que contrastó con la frialdad de la conversación de febrero pasado -cuando la audiencia duró sólo 22 minutos- fue dedicada sobre todo “a una agenda que le traje sobre lo que hicimos en los últimos meses”.
La comitiva de la familia Macri se redujo al embajador argentino Rogelio Pfirter, ex alumno y diplomático muy apreciado por Bergoglio. Junto con Juliana Awada y Antonia había otras dos hijas. Agustina, 34 años, nacida del primer matrimonio del Presidente, y Valentina, de 13, que Juliana tuvo con su anterior pareja.
Macri aseguró que fue al encuentro del insistente planteo de Jorge Bergoglio en favor de la “cultura del encuentro”. “Le hablé también de la cultura del trabajo, de la necesidad de unir a los argentinos”, remarcó.
El Presidente presentó al Papa un mapa de trabajos realizados y planeados con el ferrocarril Belgrano Cargas y dijo que se había quedado sorprendido de las preguntas y las cosas que le dijo el Pontífice argentino: “Le señalé que hablaba como un ingeniero”.
Otro tema fue elevar la calidad del trabajo, empleando vastos recursos en la formación. “Hubo coincidencia total. Además le hablé de la enorme asistencia social que hemos desplegado en los últimos diez meses”, contó.
“Claro que ese asistencialismo tiene que ser transitorio porque, si no, condena a la gente a la frustración. Compartimos como visión que lo importante es entusiasmar, educar”, dijo Macri.
En ese marco, el Papa “elogió fuertemente” la labor de la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, a quienes definió como “dos personas muy al tanto de la pobreza y las necesidades de la gente”.
Macri destacó que ahora “el Indec no dice más mentiras y señala qué alto es el índice de pobreza, lo que nos convoca a una tarea enorme. Muchas familias no la están pasando bien”.
El Papa transmitió al Presidente argentino la “necesidad de ir reduciendo los conflictos”. “Estuve de acuerdo”, contó el jefe de Estado.
También hablaron de los enormes problemas que producen los cambios climáticos: “Le conté de los parques eólicos que estamos desarrollando” y Bergoglio “me dijo que el edificio en que estábamos (dominado por la gran aula de las audiencias generales) funciona con luz solar. Y que también la mitad de la Casa de Santa Marta, el hotel interno donde se aloja, tiene la mitad de la electricidad proveniente de paneles solares”.
Otro chiste soltó Macri cuando un periodista colombiano le preguntó si había hablado con el Papa de la situación en su país. “Si, estuvimos de acuerdo en que Colombia se deje ganar el partido que jugará con nosotros dentro de un mes”.
Ya en serio, respondió que “Colombia es el tema más cercano a los argentinos. Esperamos que se abra una nueva negociación que permita un proceso de paz consolidado”. Aclaró también que no habló con Bergoglio del tema Venezuela.
De pocas palabras
“Hablamos de la Argentina y repasamos los temas del mundo, entre dos personas que se hablan por teléfono, que se conocen desde hace muchos años y tienen una familiaridad que siempre ha continuado. Somos dos de pocas palabras, sintéticos, y por esto a veces se producen equívocos en otra gente”, describió.
Del cura Brochero, que hoy será canonizado en la plaza San Pedro, ceremonia a la que asistirá con su comitiva, Macri dijo que “hoy sería lindo tener a uno como él: una persona extraordinaria muy justa”. Agregó que el Papa “vive con mucha alegría la santificación de Brochero”.
El Papa y Macri hablaron de un problema que preocupa hondamente a Jorge Bergoglio y a la Iglesia: el narcotráfico.
“El Papa me dijo que es una batalla en la que no hay que ceder. Le expliqué que hacemos foco en los temas fronterizos, aunque ése es sólo el comienzo, pero estamos haciendo avances importantes”.
El Papa pide siempre que recen por él. Y Macri que dice: “Hoy el Papa me transmitió este mensaje para mí y todos los argentinos: ‘Fuerza y para adelante’”.
Una cena en Florencia con el premier italiano
El presidente Mauricio Macri cenó con el premier italiano Matteo Renzi en Florencia, tras la “buena reunión” que mantuvo con el papa Francisco en el Vaticano y antes de participar hoy en la canonización del “cura gaucho” José Gabriel Brochero.
Macri y su esposa Juliana Awada viajaron desde la capital italiana a la ciudad cuna del renacimiento para encontrarse con el líder del centroizquierdista Partido Democrático (PD), en el gobierno desde febrero de 2014, y con su mujer, Agnese.
El Presidente, que invitado por el Premier viajó en un avión del gobierno italiano, participará hoy de la canonización del cura Brochero, que se convertirá en el primer santo nacido y muerto en Argentina.
Además, tras la misa que presidirá el papa Francisco, Macri volverá a saludar al Pontífice junto a su esposa.
Macri y Renzi, el político más popular de Italia, tuvieron varios encuentros en el año, desde los viajes recíprocos que ambos líderes hicieron a Argentina e Italia en febrero.
Arengó a los embajadores a conseguir inversiones
El presidente Macri reunió a embajadores argentinos en Europa y los convocó a “convencer de que este cambio va en serio”, al llamar a “redoblar esfuerzos” para conseguir inversiones que permitan la creación de puestos de trabajo.
Tras la audiencia que mantuvo con el Papa, el mandatario reunió a los embajadores ante los países miembros de la Unión Europea, además de Noruega, Suiza, Rusia, Serbia, Ucrania, la Santa Sede y los organismos internacionales con sede en ese continente.
“Hemos vuelto al mundo y el mundo nos ha abierto los brazos. Ustedes tienen la misión de que ese entusiasmo se convierta en cosas concretas”, subrayó Macri.
Asimismo, adelantó a los diplomáticos que el Gobierno seguirá “de cerca” las gestiones que realice cada embajada a lo largo de los próximos meses para evaluar sus “resultados”.