El oficialista de izquierda, Lenín Moreno, y el opositor de derecha, Guillermo Lasso, iban a segunda vuelta presidencial de Ecuador al encabezar las votaciones de ayer, según datos parciales del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Según información del Consejo Nacional Electoral, con un 75% de los votos recabados, Moreno ha obtenido un total de 38,74%, mientras que Lasso le sigue con el 28,73%. Tercera la candidata Cyntia Viteri (Madera de Guerrero) con el 16,2%.
Para que un candidato gane en primera vuelta debe obtener más del 50% o un 40% más 10 puntos de ventaja sobre su rival.
En caso de no darse este resultado, habrá segunda ronda el 2 de abril.
Horas antes, al cierre de las elecciones, un informe de la firma Cedatos-Gallup reveló en la cadena de televisión Teleamazonas que el postulante oficialista habría obtenido 39,4%, mientras que Lasso tendría 30,5%.
En cambio, la encuestadora Opinión Pública señaló en un canal estatal que Moreno tendría 42,9% y Lasso 27,7%. Estos últimos datos darían el triunfo en primera ronda a Moreno.
Los dos estudios tenían margen de error del 2%.
Aunque la situación no es clara, tras darse a conocer la información de Opinión Pública, Moreno aseveró que estará pendiente de los resultados definitivos del Consejo Electoral, pero asumió una actitud triunfalista y dijo: “Hemos liderado este proceso de tal forma que permite que la revolución continúe” en el poder.
Lasso destacó que habrá una segunda vuelta e invitó al resto de candidatos opositores a unir esfuerzos “para trabajar juntos por un gobierno con un amplio programa en función del interés de las grandes mayorías del Ecuador”.
El ex ministro de Estado y analista político, Francisco Huerta, expresó: “De momento, la sorpresa es que los votos escondidos, los votos vergonzantes, parece que estaban a favor de Lenín Moreno. De otra forma no se explica el resultado de algunas de las encuestas”.
Por su parte, el analista Fernando Casabe, expresó: “Hay unas cifras muy ajustadas o el margen de error es superior al 2,5% ... Ambos candidatos deberían ser más cautos, pero está claro que el primer puesto es de Moreno”.
Cedatos-Gallup desarrolló la encuesta con base a 34.000 entrevistas a votantes en 23 provincias del país de zonas urbanas y rurales, mientras que la segunda firma no dio ese dato inicialmente.
Moreno tiene 63 años y perdió la movilidad de las piernas en 1998, como consecuencia de un asalto que sufrió. Administrador, docente y empresario, fue vicepresidente de Correa entre 2007 y 2013.
Más de 12 millones de ecuatorianos estuvieron habilitados para elegir en las urnas al sucesor de Correa, a 137 diputados a la Asamblea Nacional (Parlamento) y a cinco representantes al Parlamento Andino.
La jornada transcurrió con “absoluta normalidad”, según el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Juan Pablo Pozo, y en forma “tranquila” y “pacífica”, de acuerdo con el jefe de la misión de observación de la Organización de Estados Americanos (OEA), el ex presidente dominicano Leonel Fernández.
Las urnas fueron cerradas a las 17 (las 19 en la Argentina) y los primeros resultados oficiales se conocieron pasadas las 20 (las 22 en la Argentina), según datos del CNE.
Entre otras curiosidades de la jornada electoral, Correa, quien aseguró que las encuestas decían “claramente” que no habría segunda vuelta, fue llevado en andas al emitir el sufragio por simpatizantes apostados en el centro de votación donde estaba empadronado.
En cambio, el candidato presidencial Patricio Zuquilanda, del Partido Sociedad Patriótica (PSP), no pudo votar porque al momento de presentarse en el centro de votación donde estaba registrado aún no había llegado el padrón electoral.
Lenín Moreno
Ex vicepresidente de Correa entre 2007 y 2013, de hablar pausado y sonrisa fácil, Lenín Moreno, de 64 años, es la carta del movimiento oficialista Alianza País para perpetuar el “Socialismo del siglo XXI”.
A diferencia de la imagen fuerte que proyecta Correa, su estilo "afable y conciliador" según el propio mandatario, lo perfila, como alguien capaz de abrir un diálogo con sectores enfrentados con el correísmo en la última década, opinan analistas.
Moreno, parapléjico por un disparo en un asalto en 1998, se traslada en silla de ruedas y podría convertirse en el primer ecuatoriano con discapacidad en asumir la Presidencia.
Licenciado en administración pública con estudios de medicina y psicología, es el abanderado de las causas sociales tras liderar la Misión Manuela Espejo, primer diagnóstico de la situación de los discapacitados en Ecuador.
“El poder es un ejercicio de humildad, de servicio, no de vanidad”, declaró hace poco el candidato.
Guillermo Lasso
Ex banquero de 61 años, ex ministro de Economía en el gobierno del derrocado Jamil Mahual y ex gobernador de la provincia de Guayás, Guillermo Lasso, representante de la derecha conservadora, aspira por segunda ocasión a la presidencia de Ecuador, tras perder en 2013 en primera vuelta. Nació en Guayaquil en una familia de “clase media”. Casado y con cinco hijos, se define como un “emprendedor”.
Trabajó desde los 15 años, llegó a ser presidente del Banco de Guayaquil aunque abandonó sus estudios universitarios de Economía y se dedicó de lleno a la política desde 2012.
“Vamos por el cambio” es su lema y su mayor oferta es la creación de un millón de empleos en cuatro años. Eliminar 14 impuestos y atraer inversión extranjera son otras propuestas del candidato del movimiento Creo. Correa le achaca su participación en la crisis bancaria de 1999 que derivó en la dolarización del país en 2000, el congelamiento de depósitos y la migración de cientos de miles de ecuatorianos.