Después de casi un año de sufrir en la BN, Independiente volverá a la categoría vip.
Le pasó de todo. Cambió el DT a las cuatro fechas cuando Miguel Brindisi sólo sumó dos puntos sobre 12. Llegó Omar De Felippe y recién en la sexta fecha pudo ganar (justo a Huracán 1-0 en el Ducó).
Fue armando el equipo hasta el final del 2013 y hasta llegó a estar 13 fechas sin perder.
La dirigencia contrató a Federico Insúa, más por darles un gusto a los hinchas que por necesidad.
La mano cambió, se vino todo a pique. Luego de la derrota en Sarmiento (0-2), Cantero acusó al plantel de que le estaban haciendo la cama. Los empleados no cobraban y hasta corrió riesgo el partido con Almirante.
Todo explotó cuando Crucero del Norte lo venció 3-1. A partir de ahí el ex presidente se mantuvo en su cargo 48 horas.
Claudio Klebaitis agarró el timón. Ahí la Agrupación Independiente y un grupo de socios aportantes empezó a ayudar. Igual el equipo no levantaba y se alejaba del tercer lugar.
Los futbolistas empezaron a cobrar y el ascenso se dio. Ahora viene la otra parte. Se vencen varios contratos. ¿Los más importantes? Montenegro, Morel, Parra, Fredes, Assmann, Hilario, Cáceres, Zapata, Vallés, Menéndez y Alderete.
Hay otros casos como el de Julián Velázquez, que al estar operado de los ligamentos, tiene la renovación automática.
En tanto, Pisano y Penco son el 50% propiedad del Rojo. Insúa y Tula tienen un año más de contrato.
¿Omar De Felippe? Tiene vínculo con el club hasta octubre. Ahora se operará de la cadera y su idea es dirigir a Independiente en la A, siempre y cuando el club se ordene en todos los sentidos.
Habrá que ver qué pasa con las elecciones del 6 de julio. Pero se viene la inevitable reconstrucción.
