Ya no es como aquel pequeño “Austin Mini” que se hizo famoso en los años ‘70 - aunque había nacido una década antes- y de los que aún se ve rodar alguno por Mendoza. Ni siquiera como su antecesor de la última generación. Es que el Mini Cooper 2015, que acaba de ser lanzado ha crecido en tecnología, prestaciones, pero también en tamaño e incluso se espera la pronta llegada del cinco puertas.
Hace días BMW presentó oficialmente en Buenos Aires para toda la Argentina la imagen del Mini Cooper F56, el cual reemplazará al R56, aunque por un tiempo convivirán en nuestro país. Llega en dos versiones diferentes, importado de Gran Bretaña, con varias novedades que vale la pena destacar.
Diseño exterior. Evoluciona, aunque manteniendo las formas clásicas de la marca y respetando las proporciones y la estructura de la carrocería. Rasgos estéticos característicos, como la parrilla hexagonal, faros y pilotos posteriores con anchos marcos cromados, luces intermitentes laterales de diseño específico, reinterpretación de la franja perimétrica de color negro alrededor de la carrocería.
Más grandes. En comparación con el modelo antecesor las dimensiones de la nueva versión aumentaron en longitud 98 milímetros, ancho 44 milímetros, altura 7 milímetros, distancia entre ejes 28 milímetros, distancia entre ruedas 42 milímetros adelante y 34 milímetros atrás. Así se optimizó el espacio en los cuatro asientos y el baúl de 211 litros, es decir, 51 litros mayor.
Motorización. Nueva generación de motores con tecnología MINI TwinPower Turbo en dos variantes de modelos: un tres cilindros, 1.499 cc. y 136 CV y el Cooper S con motor de cuatro cilindros, 1.998 cc y 192 CV. De serie con caja de cambios manual de seis marchas.
Seguridad. Servodirección electromecánica mejorada, ahora de serie con Servotronic. Sistema de control dinámico de la estabilidad (DSC) de serie, incluyendo el sistema de control dinámico de la tracción (DTC) y el control electrónico del bloqueo del diferencial (EDLC); en la versión “S” adicionalmente con Performance Control. Nuevo ajuste de la amortiguación y suspensión con soportes de tres recorridos de compensación, entre otros.
Asistencia al conductor. Ofrece más programas como el asistente para estacionar, cámara para conducir marcha atrás, driving assistant con sistema de regulación activa de la velocidad mediante captación de imágenes con cámara. Aviso de acercamiento peligroso al coche que circula delante, con función de inicio de la activación de los frenos. Sistema de información y entretenimiento con más funciones mediante aplicaciones, gracias a la integración de un smartphone.
Equipamiento. Amplio equipamiento de serie y opcionales. Entre otros: Performance Control, control de frenado en curva, Park Distance Control, acceso de confort, franjas para el capó y sistema de altavoces de alta fidelidad de harman/kardon.
La ficha
MINI Cooper S:
Motor: naftero de cuatro cilindros con tecnología MINI TwinPower Turbo.
Cilindrada: 1.998 cc.
Potencia: 141 kW/192 CV a 4.700 – 6.000 rpm.
Par máximo: 280 Nm entre 1.250 y 4.750 rpm (300 Nm con overboost).
Aceleración (0–100 km/h): 6,8 segundos (con caja automática: 6,7 segundos).
Velocidad máxima: 235 km/h
Consumo promedio*: 5,7 – 5,8 litros (5,2 - 5,4 litros) / 100 kilómetros.
Precio: 75.500 dólares
MINI Cooper:
Motor: naftero de tres cilindros con tecnología MINI TwinPower Turbo.
Cilindrada: 1.499 cc.
Potencia: 100 kW/136 CV a 4.500 – 6.000 rpm.
Par máximo: 220 Nm entre 1.250 y 4.000 rpm (230 Nm con overboost).
Aceleración (0–100 km/h): 7,9 segundos (con caja automática: 7,8 segundos).
Velocidad máxima: 210 km/h
Consumo promedio*: 4,5 – 4,6 litros (4,7 - 4,8 litros) / 100 kilómetros.
Precio: 65.000 dólares
