Tomó cuatro años, pero Pep Guardiola finalmente dirigirá al Manchester City, un club con pocos títulos internacionales en sus vitrinas pero con un poder adquisitivo fenomenal, al que el español llega con la misión de elevar a la cima del fútbol europeo.
Ayer, el equipo donde brilla Sergio Agüero anunció que el chileno Manuel Pellegrini no seguirá al frente del equipo la próxima temporada y que en su lugar contrató a Guardiola por tres años.