El ex ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Eugenio Zaffaroni insistió con la idea de volver a sancionar una ley de medios y pidió incluirla en una eventual reforma de la Constitución.
"Estamos teniendo un oligopolio de medios de comunicación, no solo acá sino en toda la región. Es casi un monopolio, lo que implica la creación de un discurso único. Los hombres y mujeres de la calle no estamos en contacto directo con la realidad; es algo que se nos construye a través de los medios. Por eso un monopolio de medios es incompatible con una democracia plural y es algo más propio del autoritarismo. Hay que garantizar el pluralismo de alguna forma", dijo Zaffaroni.
En diálogo con radio El Destape, el actual juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos vinculado al kirchnerismo planteó "insistir con otra ley de medios o actualizar aquella (que sancionó el kirchnerismo y derogó Mauricio Macri) y finalmente, cuando haya un consenso amplio para repensar el Estado y reformar la Constitución, habrá que darle estatus constitucional a esas prohibiciones (a los monopolios), que no son más que una garantía de pluralismo en la comunicación".
Su propuesta fue criticada por la presidenta del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), Silvana Giudici, quien vinculó la idea a posibles políticas que pueda implementar Alberto Fernández en caso de llegar al Gobierno.
"Por más que Alberto se esfuerce en disimularlo, Zaffaroni expresa con todas las letras la esencia de lo que son: Reforma de la Constitución y control absoluto de los medios", tuiteó Giudici.
Más definiciones políticas
Si bien reconoció que en este momento “no podemos tocar la Constitución porque hay otras urgencias que atender inmediatamente”, Zaffaroni propuso “repensar el Estado después de que el país salga de este pozo, de tal forma que no volvamos a caer en esto”.
"Si no, todo el esfuerzo que hagamos, todo el dolor que ha costado esta barbarie, esta pesadilla, se puede volver a producir en cualquier momento, porque no olvidemos que esta gente (por el Gobierno de Macri) ha sido votada. O sea que en el futuro, por un 1 por ciento de diferencia en un balotaje podemos tener otra catástrofe. Tenemos que pensar cómo evitar caer en lo mismo", apuntó el magistrado.
Especialista en derecho penal, Zaffaroni criticó además lo que definió como "detenciones arbitrarias" de ex funcionarios kirchneristas y dijo que hay que revisar algunas decisiones.
“No sé qué es lo que está pensando Alberto, pero esto de alguna manera tiene que terminar. No podemos continuar con presos políticos. Tenemos que volver a la Constitución y a ser más o menos un estado de derecho. Nos hemos estado apartando gravemente. Algunas reformas se imponen, naturalmente. Perdonar es divino, pero olvidar es de tontos”, sentenció.
El ex integrante de la Corte aseguró que la Argentina vive "el apartamiento más grave del estado de derecho desde la vuelta de la democracia".
Así lo justificó: “Es la primera vez que tenemos presos políticos; persecución a jueces por sus sentencias; escándalos entre jueces, fiscales y espías... Es grosero”.
No es el único
Zaffaroni no está solo en esta cruzada K. Desde el Instituto Patria, el bunker del cristinismo, se insiste con la vigencia del plan para reformar la Constitución Nacional. Incluso se realizaron actividades al respecto, y hasta se presentó un "proyecto" de nuevo Preámbulo para esa potencial Constitución modificada por los K.
En una entrevista con Joaquín Morales Solá, Alberto Fernández aseguró que "no hay ninguna posibilidad de que a ni me convenzan de que hay que reformar la Constitución".
Pero al mismo tiempo admitió que esa discusión late en el ‘cristinismo’.
Lo dijo de este modo: "Cuando le pregunto a los amigos del kirchnerismo del que fui parte en su fundación, les digo: '¿Ustedes no creen que el Gobierno de Néstor no fue muy virtuoso? Todos me dicen que sí. Y lo hicimos con esta Constitución. Yo definitivamente estoy seguro que no es la Constitución el problema. Definitivamente sé que ese no es el problema".
Las acciones sobre este punto que se difundieron con el "Patria" chocan con esa afirmación. Y con muchos otros proyectos y declaraciones que, en nombre del Instituto K divulgan ex funcionarios como el ex secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, el ex titular de la AFI, Oscar Parrilli, o el ex secretario de Planificación Estratégica para el Pensamiento Nacional, Ricardo Forster.
En la web del “Patria” se enumeran una serie de cursos dictados para su militancia. Uno de ellos se llamó “Formación Política en tiempos del Lawfare” (Guerra Jurídica, en castellano, en alusión a una supuesta persecución de los jueces a la clase política, complot del que sería víctima Cristina Fernández, según ella denuncia). En ese ámbito fue que el abogado constitucionalista Eduardo Barcesat se explayó sobre el tema e incluso divulgó un “proyecto” de Preámbulo para una nueva Constitución Nacional. Ese texto con aspiraciones fundacionales está firmado por él y nadie más.
El día que Barcesat expuso sobre el tema, lo acompañó uno de los ex panelistas del programa 678 emitido por la TV Pública durante la gestión de Cristina, el sociólogo Edgardo Mocca.
Esa idea había germinado en discusiones del grupo de intelectuales que aun acompaña a la candidata a vicepresidente de Alberto. Se trata del “Manifiesto Argentino”, cuyo principal vocero oral y escrito es el novelista Mempo Giardinelli. En un encuentro público junto a Cristina, él propuso modificar la Constitución Nacional. Ella lo aprobó. El más entusiasta y pragmático fue Leopoldo Moreau. Estaba al lado de Cristina cuando gritó que más que reformar la Constitución había que crear directamente una nueva que reemplace a la anterior.
En el último tiempo, Cristina dio a entender que buscaría imponer un nuevo "contrato social", ¿De qué hablaba? No se sabe. Ella se mantiene en silencio y solo se expresa sin repreguntas en los actos donde presenta su libro.