La llegada de Fernanda Raverta a la Anses, provocó una ola de revisionismo sobre la historia de la funcionaria. Fue cuestión de horas para que se difundiera que en su infancia Raverta había vivido en Cuba y que su padre había sido secretario del líder de Montoneros Mario Firmenich.
El padre es Mario Montoto, alias "Pascualito", un empresario que, según los revisionistas, tuvo un importante rol en la "orga". Según Horacio Verbitsky (otro hombre que participó de Montoneros), se encargada de los "fierros" y se encargó coordinar el entrenamiento en Palestina de jóvenes que participaron en la "contraofensiva".
Hoy Montoto es un próspero empresario y proveedor del Estado Nacional en insumos de seguridad, particular el monitoreo de prisiones domiciliarias y de tobilleras electrónicas; esas prestaciones también lo trajeron a Mendoza: desde 2015 provee los dispositivos de control que "ubican" a los presos en su domicilio y alertan cuando sale de él.
El año pasado, Montoto fue apuntado por los sectores ultraK, como participante en la causa en la que aparecía involucrado el falso abogado Marcelo D'Alessio; una pesquisa que fue el contraataque del kirchnerismo contra la causa de los cuadernos de las coimas. Es que el origen de ese expediente fue una denuncia por extorsión contra el empresario Pedro Echebest, a quien D'Alessio le habría pedido 300 mil dólares para quedar fuera de la investigación de los cuadernos; pero Echebest nunca fue mencionado.
Sin embargo, la empresa de Montoto llegó a Mendoza durante el Gobierno de Francisco Pérez, en julio de 2015, cuando se contrataron 100 pulseras a Surely SA por 6 millones de pesos, que es la firma de la que el padre de la actual titular de Anses es accionista.
Surely es una empresa argentina creada en 1995, cuyo objetivo comercial principal es el de proveer soluciones para la supervisión, el seguimiento y el monitoreo de personas en conflicto con la ley; representa en América del Sur al proveedor de tecnología ElmoTech Ltd.
El uso de tobilleras electrónicas continuó con la llegada de Alfredo Cornejo a la Gobernación. Así fue que en junio de 2018 se renovó ese contrato por 100 tobilleras con la empresa Surely SA, por 33,5 millones de pesos, es decir que se cobraban 459 pesos por día por tobillera.
En 2015 Surely fue la única empresa que se presentó en la licitación de Pérez; Cornejo renovó el convenio por contratación directa.
Surely también es el proveedor del Gobierno nacional de las tobilleras. De hecho, Mendoza cuenta con 400 que fueron otorgadas por la Nación. En octubre de 2017 hubo licitación de tobilleras realizada por el Gobierno nacional y el unico oferente fue Surely SA.
La última licitación fue realizada al final de la administración de Mauricio Macri y adjudicada en noviembre de 2019: el único oferente que se presentó fue Surely SA. El precio por tobillera fue 980 pesos y el contrato implicaba una erogación de 4.298 millones de pesos.
Casi podría afirmarse que la empresa en la que el padre de Raverta es accionista, tiene el monopolio de las tobilleras electrónicas. Si hay otros proveedores del servicio, no parecen estar interesados en competir, sin importar el signo político de la administración: ni en la licitación de Pérez en Mendoza, ni en las de Macri en la Nación, hubo otros interesados.
El contrato con la provincia 2018 termina en junio. Los Andes consultó al Ministerio de Seguridad si había novedades acerca del servicio. Por ahora no las hay aún cuando el servicio se volvió clave en la polémica nacional por el masivo otorgamiento de prisiones domiciliarias desatado por la Covid-19.
Empresas dedicadas a seguridad y defensa
Mario Montoto es presidente de la Cámara de Comercio Argentino-Israelí. Además aparece vinculado a varias empresas, la mayoría vinculadas a la defensa y a la seguridad. Es accionista de Surely SA desde 2010 (según figura en su perfil de Linkedin); desde 2008 también es director de GlobalView S.A. que se dedica a la integración, desarrollo, implementación y diseño de sistemas de video vigilancia urbana, así como también ofrece consultoría y servicios a empresas de seguridad privada.
También es presidente de Taeda SA desde 2005, una empresa dedicada a la producción, edición y comercialización de contenidos editoriales, gráficos y audiovisuales. Además es presidente de la Fundación Taeda.
Otra empresa de Montoto es CODESUR SA, firma de la que es presidente desde 2003. Codesur ofrece soluciones en temas de defensa y seguridad y tiene alianzas estratégicas con empresas líderes en tecnologías del sector de Estados Unidos, Israel, y Europa. En 2008 Codesur compitió por la reparación del submarino ARA San Juan; la licitación fue declarada desierta.
El dilema de los apellidos
¿Por qué Fernanda Raverta no lleva el apellido de su padre, Mario Montoto? Según diferentes medios nacionales, la relación entre la camporista titular de la Anses y su padre empresario no es la mejor y ella decidió usar el apellido de su madre, María Inés Raverta, desaparecida en Lima (Perú) en 1980, ciudad dónde estaba exiliada.
El resto de su infancia lo pasó en Cuba, en la conocida "guardería" de Montoneros.