La Municipalidad de la Ciudad ha cerrado más de 120 lotes baldíos en los últimos cuatro años, con el objetivo de colaborar con la seguridad, la higiene urbana y el ambiente. La operatoria se ha realizado por medio de licitaciones o por administración, con costos cargados a los frentistas.
A la fecha se han realizado cerca de 1.600 metros de pared de cierre y cerca de 1.400 m2 de veredas, en todo el ámbito de la ciudad, incluidos los barrios del oeste.
Se procede de la siguiente forma. Un inspector de Obras Privadas detecta una superficie baldía y emplaza al propietario a la limpieza de la misma y a su cercamiento. Si la vereda no está en condiciones, también debe procederse a su reparación. Los contribuyentes disponen de un plazo de 10 días hábiles para ejecutar las obras y vencido el lapso, el municipio procede a realizar los trabajos con cargo a la propiedad.
Las licitaciones comenzaron en 2009, cuando se cerraron 200 metros lineales, para tapar 16 terrenos.
Al año siguiente se avanzó a 600 metros lineales, para tapiar 23 baldíos. Esta licitación incluyó limpieza de los espacios, cuatro demoliciones en estado de derrumbe y la construcción de 500 m2 de veredas.
En 2013 se hizo el tercer concurso, que incluyó el cerramiento de 19 baldíos, hasta totalizar 400 metros lineales y 500 m2 de veredas (adoquines).
Finalmente, se procedió con el cuarto llamado licitatorio, que produjo el vallado de 19 lotes, también por 400 metros lineales.
En muchos de los casos, los cierres estaban fundamentados por razones urbanísticas y de seguridad. Uno de los lugares cerrados fue el aparentemente tranquilo callejón de López de Gomara y Perú, en la Sexta Sección. Esa previsión no alcanzó a proteger la vida del médico Sebastián Prado, asesinado en un intento de asalto en setiembre de 2013 por dos delincuentes. El vecindario había pedido la clausura de una pasada hacia las vías férreas por la que deambulaban personas de malvivir y se lo ejecutó con cerramiento antes del crimen del profesional.
Características
La secretaria de Infraestructura, Laura Profili, explicó que los cierres de mampostería se realizan con muros que tienen una altura de 2,20 metros en su coronamiento y disponen de abertura, donde se colocan puertas metálicas. En algunos casos se disponen serpentinas en la parte superior.
Como dato anecdótico, en el despacho de la funcionaria se guardan numerosas llaves de inmuebles, cuyos dueños no han pasado aún a retirarlas.
“Una vez que el baldío se cierra, se le hace el cargo al propietario por los montos que salió la licitación, esto es, le cobramos a los particulares lo mismo que nos cobró la firma que hizo el trabajo; le generamos una cuenta que debe ser cancelada en Rentas”, añadió la secretaria. Lo mismo se hace con las veredas.
Pero, en esta operatoria hay una novedad implementada este año por decisión del intendente Víctor Fayad, quien resolvió que se intervinieran las veredas dañadas por raíces de árboles. “Las hacemos nosotros y no las cobramos; para este plan se dispuso de 4 millones de pesos”, indicó Profili. Solo se procede en los tramos dañados por las ramificaciones de los forestales y no en toda la superficie, lo que ha generado algunos enojos de los frentistas que pretenden que el arreglo sea total.
Solución para el ‘pozo Maristas’ y ‘Timarai’
En la capital hay “agujeros negros”que aparentemente están en proceso de revertir su situación. Uno de ellos es el llamado pozo de Maristas, en San Martín y Alem, donde un grupo inversor planea construir estacionamientos, y un shopping con cines.
Otro es el predio conocido como Timarai, sobre Boulogne Sur Mer (esquina Lamadrid), donde el grupo Cioffi ha anunciado la construcción de dos torres de departamentos, en plena Quinta Sección. En su momento, hubo oposición vecinal por la altura de los proyectados inmuebles.
"Tanto uno como otro emprendimiento tienen la documentación presentada y aprobada en el municipio", indicó la ingeniera Laura Profili. "Tenemos el anuncio de ambos inversores y pronto tendrían que empezar con los emprendimientos", agregó.
Hipermercado en ejecución
La cadena de supermercados Coto tiene en plena ejecución su primer establecimiento en Mendoza, en las calles Perú y Videla Correa, antigua sede de la Dirección de Servicios Públicos de la Municipalidad.
El terreno es de 28.800 m2 y se ejecutarán edificaciones hasta cubrir 27.800 m2, según informó la directora de Obras Privadas municipal, Laura Villanueva.
Con la excavación y la nivelación del terreno, ya dieron comienzo las obras que estarían listas a fin de año. Habrá 343 sitios de estacionamientos cubiertos y 200 descubiertos.