La Argentina y su petrolera pública, YPF SA, tendrán que lidiar hasta el final con un juicio multimillonario en los Estados Unidos por la expropiación que decidió el país en 2012, dado que ya no hay posibilidades de traer la disputa a los tribunales locales.
Esto es porque tras un año de idas y vueltas, ayer la jueza del Segundo Distrito Sur de Nueva York, Loretta Preska, falló en contra de la Argentina al decidir que el juicio por la expropiación de la petrolera seguirá en los tribunales de los Estados Unidos hasta que se resuelva la cuestión de fondo.
En este juicio están de un lado la misma empresa y su representación legal más la Procuración del Tesoro y un estudio de abogados neoyorquino; del otro, los fondos de inversión Burford Capital y Eton Park.
La demanda, que podría costarle al país entre 1.700 millones y 9.000 millones de dólares, se inició en abril 2015 cuando el fondo Burford Capital adquirió los derechos de litigio de las compañías del argentino Grupo Petersen.
Ese grupo empresario, comandado por el santafesino Enrique Eskenazi, era propietario del un 25% de las acciones de YPF al momento de ser expropiadas por orden de la entonces administración de Cristina Fernández de Kirchner.
En la noche del 3 de mayo de 2012 y con el apoyo de 207 diputados (de los 257 que conforman la Cámara baja) el Congreso convirtió en ley la expropiación del 51% de la petrolera. La iniciativa kirchnerista fue apoyada por la UCR y el entonces Frente Amplio Progresista.
La empresa fue expropiada con la idea de que era una herramienta clave para la ambiciosa explotación de Vaca Muerta que tenía prevista el Gobierno. Eso nunca ocurrió en la magnitud esperada y ahora el país podría tener que pagar hasta más de cinco veces el valor bursátil de la compañía, que es de 1.707 millones de dólares.
La resolución sobre el futuro del juicio se dio un año después de que Preska ordenara a la Argentina y a los demandantes, que presentaran escritos para respaldar sus respectivas posturas respecto de dónde debía continuar y cómo debe resolverse el litigio.
YPF dijo en un comunicado ayer que "interpondrá todos los recursos legales necesarios para defender sus intereses", tras conocerse el fallo de Preska. Según pudo saber este diario, sus abogados se comunicaron ya con el Procurador del Tesoro, Carlos Zannini.
YPF reseñó al mercado que el viernes el tribunal de Preska, la jueza que reemplazó al fallecido Thomas Griesa, "rechazó el planteo de Forun non conveniens que fuera oportunamente presentado por la Sociedad así como por la República Argentina".
Eso significa que para el gobierno de Mauricio Macri –que gestionó el juicio hasta diciembre- como para el actual, lo mejor es resolver el diferendo en Argentina. Pero el fallo de ayer dispuso "la competencia del mencionado Tribunal para resolver sobre el fondo de estos reclamos".
Como resultado inmediato del fallo, los representantes del país deberán asistir el 19 de junio a una audiencia entre partes convocada por la jueza Preska para plantear sus posiciones sobre la continuidad del proceso.
Buford Capital, un fondo británico, lleva adelante el reclamo de dos demandantes: Petersen Energía Inversora y Eton Park Capital Management. Este último tenía en 2012 el 3% del total del paquete accionario.
Hay distintas estimaciones acerca de cuál podría ser el costo para la Argentina en caso de perder este juicio. La administración de Mauricio Macri había cotizado la disputa en unos 1.700 millones de dólares. Pero Buford Capital pide una reparación de 9.000 millones de dólares por los daños económicos generados por la expropiación al Grupo Petersen.
