River Plate preparó su artillería para frenar al Gremio, actual campeón, en un promisorio partido de ida de las semifinales de la Libertadores. En los cuartos, el Millo eliminó a Independiente (0-0 y 3-1), mientras su rival de turno pasó por encima a otro argentino, Atlético Tucumán, al que venció 2-0 y 4-0.
Acostumbrado a los cruces contra argentinos: Así como lo hizo contra el Decano, Gremio se acostumbró últimamente a los duelos a todo o nada contra equipos de nuestro país.
En octavos eliminó por penales a Estudiantes (LP) luego de un triunfo con angustia en Porto Alegre, y en la definición del 2017 superó a Lanús y a Godoy Cruz, con éxitos en los 4 juegos. Y ante River busca prolongar la serie exitosa contra argentinos, más allá de que el Pincha estuvo a segundos de dejarlo afuera, en lo que hasta aquí fue el examen más riguroso que soportó el defensor de la corona continental.
Con bajas: Gremio llega con la misión de rescatar al menos un empate, con el lastre de no poder contar para este partido con dos figuras importantes como Everton y Luan, descartados por lesiones. Con la misión de evitar un tropiezo, el once gaúcho apelará a la seguridad del arquero Grohe, y a la solidez de la pareja central que componen el argentino Kannemann y Geromel.
Va por todo: Con la misión de reconquistar la Libertadores que alzó por tercera y última vez en 2015, River se lanzará al ataque, más allá de que el viernes pasado dejó su invicto de 32 partidos oficiales al perder 1-0 con Colón por la Superliga.
En ese choque el DT Gallardo alineó una mayoría de suplentes y reservó a los titulares para hoy, que incluirá el regreso de Franco Armani y Gonzalo Martínez.
"Vamos a ser avasallantes en nuestra cancha. Esa va a ser la idea. Será duro, pero sabemos que tenemos calidad técnica y buen manejo de pelota. Gremio es el último campeón, pero le tengo fe al equipo para que logre un resultado positivo y después ir a pelear a Brasil", dijo el Muñeco.