Un primer tiempo digno de una final. Por algo se enfrentaron los dos mejores equipos de la fase clasificatoria.
El número uno, Anzorena y el número dos, Atlético Club San Martín. Arrancó mucho mejor el dueño de casa con un parcial de 7-2 y un Juan Luca Hernáez, intratable en el perímetro y en los cortes hacia el aro por el eje de la cancha.
De inmediato, reaccionó el Chacarero de la mano de Mosley con dos triples y el esfuerzo enorme de Del Ponte debajo del aro. Pasó al frente promediando el cuarto y a partir de ese momento arrancó el show goleador de Taylor.
Obvio, Schestakow se sacrificó en cortar línea de pase de Mosley, por lo tanto, el juego ofensivo del León pasó por Taylor, a quién no le pesó la responsabilidad y se convirtió en la vía de gol del quinteto de Sergio Peralta (25-32).
En el segundo cuarto, la historia cambió. Anzorena, ajustó las marcas, defendió muy bien el pick and roll con Taylor y empezó a generar su juego, el que me la gusta a Gutiérrez, correr la cancha y ataques muy rápidos con pases de pelota permanentemente.
Con dos bombos de Nico Aguilera se puso en juego y con un Caniche Estalles imparable en el uno contra uno, pasó al frente y levantó una desventaja de diez puntos. Los últimos tres minutos fueron palo a palo, se moría con un triple de Castro que le daba una ventaja mínima a ACSM pero, Cantalejos, de gran partido, cerró la primera mitad con una bomba de 6.75 (53-51).
El tercer cuarto fue golpe por golpe. Con un parcial de 4-0, el León tomó nuevamente una ventaja y con esa diferencia jugó todo el parcial. Goleo repartido y apareció Mosley en todo su esplendor con 11 puntos.
En Anzorena, Juan Luca Hernáez, llevó el goleo al principio (8 puntos) y luego la actitud, el coraje y el juego de Cantalejos, lo mantuvo a Anzorena en juego: 73-82.
En el último capítulo, el León se lució ante su gente con una fuerte defensa sobre los hombres claves de Anzorena y en ataque, brilló el juego colectivo donde Elías Del Ponte, demostró que su evolución en el juego es notable.
