Un cuarto de hora, tan solo ese tiempo le valió a la sociedad entre Lionel Messi y Sergio Agüero darle soluciones en ataque al Seleccionado argentino, antes que la tan esperada en la previa con el propio Messi y Carlos Tevez. Las expectativas por ver en cancha como titulares a Messi y Tevez, tras la baja de Gonzalo Higuaín y con Agüero en el banco, fueron altas porque ese hecho no se observó en la Copa América Chile 2015 y generó críticas al entrenador Gerardo Martino.
Se trataba del análisis de la convivencia en cancha del mejor jugador del mundo y uno de los mejores delanteros del fútbol mundial, pero ésta no rindió los frutos esperados. Messi buscó a Tevez y viceversa, pero en contadas ocasiones. En el primer tiempo, especialmente, se vio interacción entre ambos ante el intenso y dinámico seleccionado mexicano.
Messi jugó retrasado, porque el balón no le llegaba ante la presión de los mexicanos y cuando levantó la cabeza siempre buscó a 'Carlitos', que creó espacios para recibir en soledad, como a los 11 minutos en un pase largo del goleador histórico de Barcelona de España.
La búsqueda entre Messi y Tevez duró poco porque Argentina tuvo demasiados problemas en el mediocampo, donde fue superada por la presión del rival, y en la última línea exhibió un juego de regular a malo. En la segunda etapa, el 'Apache' buscó por sus medios quebrar la resistencia de la defensa mexicana, mientras Messi observaba de lejos y simultáneamente el flojo rendimiento del equipo se pronunciaba. El partido llegó al minuto 30 del segundo tiempo, cuando la Argentina caía por dos goles y Martino dispuso el ingreso del “Kun” por Tevez, que significó el resurgimiento del equipo con otras tres modificaciones.
En poco tiempo, Messi y Agüero le dieron soluciones a la Argentina, al menos en el marcador, para empatar un encuentro que se encaminaba a una goleada mexicana.