El cuerpo ya sin vida y en medio de un reguero de sangre, fue encontrado por la policía, respondiendo un llamado del 911, hecho por un vecino que, en forma casual, pasó por la casa ubicada en San Martín y Alberdi (Las Heras) y observó la reja cerrada, pero la puerta de la casa entreabierta.
Según se conoció horas después, Angel Reyes vivía solo en ese lugar desde hace mucho tiempo y era conocido por todo el barrio. Lo definían como un "tipo tranquilo" y que se dedicaba a realizar changas en la zona, pero también era conocido por los uniformados que, a poco de que fuera identificado, encontraron el prontuario del septuagenario "cargado" con antecedentes emparentados con el delito o mejor dicho, con varios.
El hombre había sido acusado de defraudación, estafas, robo, lesiones, hurto, falsificación de documento público y abuso sexual agravado, entre las principales, mientras que su nombre también estuvo en la Orden del Día de algunas oficinas fiscales en los últimos años.
Asesinato
Mientras la investigación, en manos del fiscal de Homicidios, Gustavo Pirrello, trascendió que efectivos de la Policía Científica, al inspeccionar el cuerpo, descubrieron que además de algunos golpes, el hombre había recibido "por lo menos diez puñaladas", todas dirigidas a zonas por demás vulnerables como el rostro y el cuello, lo que según los peritos se traduce que fueron hechas con ensañamiento.
Uno de esos puntazos o cortes afectó una arteria, lo que provocó que se desangrara y terminara muerto en el piso, versión que por estas horas podrá ser confirmada por los profesionales del Cuerpo Médico Forense.
Robo o venganza
Las hipótesis, en esta etapa inicial, se dividen en dos posibles. Una, referida a que la casa de Reyes fue "visitada" por un ladrón y al ser descubierto lo apuñaló, tras lo cual escapó, sin cerrar la puerta. Este razonamiento deberá ser complementado con un inventario para saber si falta algo de las pertenencias de la víctima.
Mientras que otra variante, que también es investigada, está referida a que ambos se conocían de antes. Esto teniendo en cuenta que, por el momento, no hay indicios de que el agresor haya ingresado violentando puertas o ventanas.
Aquí el abanico de posibilidades se abre entre una discusión del momento o, en su defecto, la resolución de algún viejo pleito que fue resuelto por el agresor que, por el momento no fue detenido, aunque existan huellas de su paso por el lugar.
Apuñalado en el Sur
Un hombre de 35 años de edad fue apuñalado por un sobrino, en medio de una discusión familiar. Fue durante cerca de las 3 y media de ayer, en una vivienda de la localidad sanrafaelina de Goudge.
El hombre, previo a ser asistido en el hospital Schestakow, pasó por el destacamento policial, donde dio cuenta de que un sobrino había sido el agresor.
En el centro asistencial le diagnosticaron herida cortante en omóplato derecho y otra en su mano izquierda, por lo que quedó internado.
