El joven estudiante universitario de 20 años que fue detenido el miércoles acusado de ser el creador de la aplicación que violó el sistema de carga de Red Bus fue imputado este viernes por fraude en perjuicio de la administración publica en la modalidad de estafa, con penas de 2 a 6 años. Tras escuchar los cargos en su contra se abstuvo a declarar, y al no contar con antecedentes y tratándose de un delito excarcelable, quedó libre.
En base a las pruebas reunidas hasta el momento, el fiscal de Delitos Económicos Hernán Ríos decidió acusar formalmente a Martín de Casas, quien se encontraba preso desde el miércoles,
Respecto a si el imputado es el creador o no de la aplicación que se usaba para cometer el delito todavía no está determinado, ya que restan realizar algunas pericias en los dispositivos electrónicos secuestrados a fin de determinar si se creó desde estos o si solo se usó una aplicación creada por otra persona.
Fue descubierto a través de Facebook
De Casas fue descubierto por efectivos de Delitos Económicos a través de Facebook. “Utilizamos la misma red social con la cual el joven contactaba a la gente”, explicó un alta fuente ligada a la investigación.
Por lo pronto, el sospechoso no sería el creador de la aplicación ilegal conocida como "Bus Cracker", sino sólo alguien que había montado un "kiosquito tecnológico" para ganar -ilegalmente- unos pesos.
La semana pasada, la empresa Red Bus detectó un cúmulo de cargas que presentaban algún tipo de anomalía por lo que decidieron hacer una denuncia en la fiscalía.
El joven fue detenido en su casa del barrio Bombal de Ciudad y tenía en su poder dos teléfonos celulares con tecnología NFC(comunicación inalámbrica de corto alcance) lo que le permitía, a través de la App "Bus Cracker", cargar tarjetas de Red Bus.
“El detenido contactaba por Facebook a personas, les ofrecía cargas de 100 pesos pagando sólo 50 y los citaba en un lugar”, explicaron.
Tras la detección del fraude, se bloquearon más de 400 tarjetas que fueron cargadas con este sistema paralelo.