Tal como se ha observado en distintos estudios, los niños que se escolarizan de forma temprana suelen lograr mejor desempeño en su posterior trayectoria educativa.
Se trata de un postulado que se verifica con los resultados de las pruebas Aprender, pero que tiene sus particularidades de acuerdo con el nivel socio económico de los estudiantes.
Según el informe "El jardín de infantes no puede solo", del Observatorio Argentinos por la Educación entre los chicos de menos recursos, afectados por múltiples privaciones (alimentación, saneamiento, vivienda, salud, información, estimulación), el nivel inicial no alcanza a compensar las desigualdades de aprendizaje.
El observatorio tomó datos esta evaluación a nivel nacional, lo que les permitió concluir que la asociación positiva entre la asistencia al nivel inicial y mejores resultados en primaria y secundaria se comprueba en los alumnos con Nivel Socio Económico (NSE) alto y medio pero no así en los de NSE bajo.
Desde la Dirección General de Escuelas (DGE), señalaron que se trata de una realidad que se verifica en nuestra provincia. "Hay una brecha que tiene que ver con el nivel socio cultural que aparece en todo el país y que se da también en Mendoza, no la hemos podido superar", reconoció María Julia Amadeo, directora de Planificación de la Calidad Educativa. De todas maneras remarcó que se trata de una situación que puede modificarse.
“No hay que caer en el fatalismo sociológico, tenemos que superar esa mirada”, aclaró. Para la experta la respuesta están en encontrar las estrategias para enseñar según las necesidades de cada nivel. También señaló que se debe trabajar para mejorar la calidad del servicio educativo.
"No es sólo la inclusión. Cuando los sistemas educativos se expanden a nivel general, tienen una baja en los resultados en una primera etapa. Luego hay que empezar a trabajar para añadirle calidad", remarcó. Aclaró que no se trata de una crítica a la anterior gestión, sino que se entiende lo realizado como parte de un proceso que hay que completar.
"En Mendoza hemos encontrado un nivel inicial que se había expandido, pero que tenía muy bajo nivel. Estaba muy ritualizado", explicó a la vez que comentó que sólo tiene una duración de tres horas y media.
"Estamos trabajando para extenderlo a cuatro horas y media y sumarle calidad. Lo vamos a ir logrando, estamos seguros que lo docentes van a ir respondiendo, lo hemos visto en otros niveles", aseguró. Por otra parte, se mostró de acuerdo con el postulado que titula el informe "El jardín de infantes no puede solo". Y explicó: "ese título hace intertexto con un artículo que se llama 'La escuela sola no puede'.
Hace mucho se ha probado que solamente la tarea del docente en la escuela no logra ser un elemento igualador, sabemos que tienen que darse distintas políticas desde distintos ángulos para que coadyuven: de salud, de desarrollo social, entre otras”, enumeró la especialista, a la vez que aseveró que hay preocupación política por trabajar en este sentido.
En detalle
Los datos analizados por el Observatorio a partir de la prueba Aprender 2016 indican que el porcentaje de estudiantes de NSE bajo que logra nivel "satisfactorio o avanzado" en Matemática en primaria no varía significativamente según asistencia a nivel inicial.
La cantidad de alumnos con buenos desempeños es incluso mayor entre quienes no fueron al jardín (57,3%) que entre quienes fueron desde los 4 años (52,8%).
En secundaria tampoco se dan grandes variaciones de desempeño entre quienes no asistieron al jardín y quienes sí lo hicieron. Esa correlación sí se verifica para los chicos de NSE alto: entre ellos, solo el 15,5% de quienes no asistieron al jardín logra buenos desempeños, mientras que la cifra es más del doble (39,0%) para aquellos que asistieron desde sala de 3 o antes.
