Sergio Salgado sigue sin acudir al llamado de la Justicia. De hecho, avisó que no asistirá hasta que se resuelvan los pedidos que su abogado hizo por él. “Me presentaré cuando se resuelva la recusación que presenté contra Garay”, dijo a Los Andes.
Efectivamente, ayer, cuando el fiscal de Delitos Complejos, Santiago Garay, lo esperaba en su despacho, el que apareció fue el abogado Fernando Peñaloza, que trabaja para la comuna y y decidió renunciar por las críticas que recibió por su doble función.
El abogado, que el lunes había hecho un pedido de “mantenimiento de libertad” para el intendente, ayer hizo dos “trámites”. Por un lado, elevó al 6° Juzgado de Garantías, a cargo de David Mangiafico, un “control jurisdiccional”, para que se revise la orden de detención emitida por Garay. Por otro lado, recusó al propio Garay por “irregularidades” en procedimientos anteriores.
Es esta recusación la que debe resolver el fiscal para que Salgado finalmente se presente. Se descuenta que Garay la rechazará, pero esa situación “puede ser apelada y hasta llegar a la Corte”, indicó Peñaloza.
Mientras tanto, Salgado sigue sin aparecer y convencido de que todo esto se trata de un “golpe institucional” contra su intendencia.
Así lo hizo saber en contacto con este diario. Su intención entonces es contraatacar, tal como lo hizo con Garay, contra el Gobierno y el radicalismo.
Desde su visión, tanto el gobernador Alfredo Cornejo, como la UCR y los concejales opositores, quieren destituirlo. “Quieren que la titular del Concejo (Norma Trigo) sea la intendenta”, dijo.
El presidente de la UCR e intendente de Capital, Rodolfo Suárez, lo negó: “No nos interesa eso. Es más, preferimos que sea un justicialista”.
Además, Salgado insistió que funcionarios de Gobierno le pidieron que abandone su cargo, algo que también fue negado por el ministro Dalmiro Garay.
Como sea, Salgado aseguró que seguirá en su cargo. “Espero que esto se resuelva rápidamente, así vuelvo a mi despacho”, dijo el intendente.
