Hoy se cumplen 50 años desde que el hombre llegó a la Luna y 50 años de la fake news más difundida de la historia, aquella que afirma lo contrario. Cualquier duda al respecto se disuelve adentrándonos en el tema.
Existen demasiadas pruebas científicas de que el alunizaje se concretó aquel 20 de julio de 1969. Empezando por el reflector que dejaron allí los astronautas del Apolo 11. Neil Armstrong y Edwin "Buzz" Aldrin realizaron una serie de caminatas en la superficie lunar, durante una de las mismas dejaron un artefacto para estudiar el sistema Tierra-Luna. Se trata del único experimento que sigue funcionando medio siglo más tarde. Su función es devolver datos a centros científicos de todo el mundo, incluido el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA. Gracias a dicho reflector, científicos de diversas instituciones que analizan sus datos han observado, entre otras cosas, que la Luna se está alejando de la Tierra y que la Teoría de la Relatividad de Einstein es precisa.
Las rocas son otro punto para demostrar científicamente la existencia de aquél viaje. Los estadounidenses regresaron al planeta con veintidós kilos de rocas. La antigüedad de las mismas es muy superior a cualquier piedra terrícola. Indiscutibles son también las huellas humanas y la ocasionada por la nave al alunizar. En imágenes tomadas por satélite pueden observarse actualmente.
Las voces en contra señalan al brillante cineasta Stanley Kubrick como artífice de las famosas imágenes que el mundo observó. Fundan este tipo de conjeturas en hechos concretos. Uno de ellos es que la bandera de Estados Unidos -izada por los terrícolas- ondeara. La NASA dio una explicación. El movimiento fue producto por una combinación entre la manipulación de los mismos navegantes espaciales y la precaria transmisión televisiva.
Otra de los cuestionamientos populares es el conocido "Si realmente llegaron ¿por qué nunca volvieron a la Luna?". Pregunta que sólo puede hacerse desde el absoluto desconocimiento. Hubo otros viajes, doce fueron los hombres que caminaron sobre la superficie satelital. De estos siguen con vida sólo David Scott, Charles Moss Duke, Jr., Harrison H. Schmitt y Edwin Buzz Aldrin. Todos poseen entre 83 y 89 años.
Este no sólo fue un suceso histórico descomunal, se trató también de una victoria estadounidense sobre la Unión Soviética. En el marco de la Guerra Fría, dos sistemas –capitalismo y socialismo-, así como dos modos de entender el mundo, se enfrentaron. Ambas naciones querían demostrar a través de la ciencia sus respectivas y supuestas superioridades. Quizás allí encontramos la prueba más irrefutable de todas. De ser mentira la llegada del hombre a la luna, el Kremblin lo hubiese denunciado y demostrado inmediatamente.
