Lanús venció anoche a Boca por 2-0 con goles marcados antes de los 5’ de juego, en un partido en que estableció una amplia superioridad a lo largo de todo el desarrollo. El resultado afirmó al vencedor en la punta de la Zona 2 y dejó a Boca prácticamente fuera de la competencia por el título.
El equipo del ex Tomba Almirón fue compacto, no tuvo fisuras y, dentro de un contexto muy parejo, destacaron las figuras de Martínez y Braghieri en el fondo. Lanús comenzó muy conectado y Boca todo lo contrario.
El anfitrión movió la pelota con comodidad, Sand recibió por el medio, giró, abrió hacia la izquierda, recibió Acosta después de un rebote, enganchó hacia adentro y sacó un derechazo bajo al palo más cercano que venció a Orion. Dos minutos más tarde, Velázquez ejecutó un tiro de esquina desde la izquierda, Almirón la peinó a la altura del primer palo y Sand arremetió para empujarla adentro.
¿Y boca? Lodeiro reventó el travesaño con un tiro libre, pero no mucho más.
El segundo tiempo le sobró al partido, ya que el local lo controló sin sobresaltos y dejó pasar el tiempo. Boca no encontró nunca el camino hacia el arco adversario.
De esta manera, Guillermo Barros Schelotto, quien perdió el invicto en su breve período al frente del equipo Xeneize, deberá encontrar soluciones a corto plazo para un conjunto cuya imagen fue lamentable, ya que ni demostró rebeldía para hacerle frente a lo que se suponía debía ser “el” partido para descontar puntos.
Guillermo se fue preocupado por el nivel xeneize
“Te deja preocupado porque uno pretende que el equipo sea el que maneja el partido y esta vez no lo pudimos hacer. No habían pasado cuatro minutos y perdíamos dos a cero, y después nos costó generar situaciones de gol. Aún así, en el primer tiempo a través del toque y ataques por los costados tuvimos una llegada de Carlos (Tevez) y el tiro libre de (Nicolás) Lodeiro que da en el travesaño. Se intentó, se luchó, pero no pudimos”, manifestó en su análisis Guillermo. “Hay que trabajar el doble”.