El Ministerio de Seguridad lanzó la aplicación móvil "Policía de Mendoza", disponible para todo el personal de la fuerza (uniformados, administrativos y civiles).
En total, son casi 12.000 trabajadores los que están en condiciones de utilizar la plataforma; y se les genera un usuario y contraseña.
Entre tantas funciones disponibles, se destaca la posibilidad de que los efectivos fichen su entrada y salida al horario del servicio, así como también que dejen constancia de todos los detalles sobre los servicios extraordinarios prestados.
"No se obliga a nadie a descargarla, pero a los policías les conviene tenerla ya que avisa el momento exacto en que se activa el servicio extraordinario y dónde está la persona -cuenta con GPS-. Eso permite corroborar que se estuvo en el lugar y se convierte en algo imposible pasar un servicio que no se ha hecho", destacó el jefe de gabinete del Ministerio de Seguridad, Hugo Sánchez.
En el caso de los efectivos que opten por no usar la app, el control corre por cuenta del encargado de servicio. Éste ingresa los datos del uniformado al legajo digital y supervisa la prestación.
Justamente esta situación -la de tener el registro de cada uno de los pasos- ha incomodado a varios policías; quienes argumentan sentirse controlados en todo momento y ser parte de un "Gran Hermano".
“Se está tratando de hacer un control efectivo en mejorar la operatividad modernizando la tecnología. Y a nivel gerencial, también se están controlando todas las áreas en tiempo real. Se hace un seguimiento de todo lo que pasa en las comisarías y destacamentos, por ejemplo”, destacó Sánchez, quien ponderó este trabajo en comparación con lo que se hacía antes: anotar las novedades en libros.
Cámaras de seguridad fijas (1.336 en toda la provincia), patrulleros inteligentes (300 con videovigilancia, 30 con lectora de patentes y 20 con tecnología de reconocimiento facial) y la posibilidad de conocer hasta la velocidad y el combustible consumido por los móviles son solo algunos de los condimentos de este "Súper Gran Hermano" con que hoy el Ministerio de Seguridad controla a los mendocinos (policías incluidos).
Todo controlado
Además de lo ya detallado, la app ofrece información útil para los policías. Cada trabajador tiene su perfil con información personal y foto; y recibe notificaciones cuando se le ha acreditado el sueldo.
"Los legajos están digitalizados, y todo se actualiza de forma permanente. Ahora se sabe qué arma, qué chaleco y en qué dependencia está cada uno; así como también su trayectoria, y calificaciones", resumió el director de Administración, Diego Lázzaro.
El Sitrac, en tanto, es el sistema que permite monitorear absolutamente todo lo referido a los vehículos de la fuerza -la flota total de Seguridad es de 1.700 unidades-. Consta de seguimiento satelital que permite ver la ubicación y el recorrido de cada móvil, en tiempo real y los días anteriores.
Hasta envía alertas cuando hay un consumo de combustible mayor al previsto.
“La premisa es medir todo lo que se hace”, resumió el director de Informática y Comunicaciones del Ministerio, Maximiliano Jaime.
Según destacaron los funcionarios, la tecnología también ha hecho su aporte en cuanto a operativos, detenidos y trasladados -dentro y fuera de las dependencias-.
“Se pretende evitar los traslados. Antes se aprehendía a una persona y había que llevarla a la comisaría. De allí a la mesa de detenidos para que se la identificara; y de nuevo a la comisaría. Eso implicaba un auto con 2 policías abocados a cada detenido. Ahora la identificación y control de antecedentes se hace en la misma comisaría o en el procedimiento”, sintetizaron Jaime y Sánchez.
Videovigilancia
Contando las que están en puestos fijos y las de los patrulleros equipados, la Policía cuenta hoy con 2.000 cámaras para ver todo lo que ocurre en Mendoza.
Los 300 móviles con videovigilancia tienen una cámara interna (situada en el techo, a la altura de la reja que separa al trasladado de los efectivos) y otra externa (adelante de la baliza y que apunta al frente).
La definición de la imagen es de 1.280 DPI y -además de estar disponible on line en tiempo real- la información queda grabada. La capacidad de almacenamiento es de un petabyte.
La idea del Gobierno ahora es sumar 100 móviles más con esta tecnología.
Los “ojos” de los móviles
Los 300 móviles con videovigilancia tienen una cámara interna (situada en el techo, a la altura de la reja que separa al trasladado de los efectivos) y otra externa (adelante de la baliza y que apunta al frente y abarca el capot -la idea es que las requisas se hagan allí también, así todo queda registrado-).
Cada una tiene una capacidad de almacenamiento de 1 petabyte. “Han tenido un éxito tremendo. Desde enero creció 300% la cantidad de oficios de la Justicia solicitando al Ministerio material como prueba.
Además de la nitidez de las imágenes, aporta la fecha, ubicación y hasta velocidad de un móvil. Tenemos ojos donde están los móviles”, sintetizó Jaime.