El gobierno islamo-conservador turco anunció el jueves medidas para alentar a las parejas a tener más hijos, una prioridad del presidente Recep Tayyip Erdogan, preocupado por la disminución del crecimiento de la población del país.
El plan revelado por el primer ministro Ahmet Davutoglu prevé, entre otras medidas, la creación de primas al nacimiento y un aumento de la duración de las bajas por maternidad.
"La economía puede ser reactivada tras una crisis, pero si el desarrollo de las familias se perturba, no podemos remediarlo" justificó Davutoglu en la televisión.
La población turca pasó de 20 millones de habitantes en 1950 a 76 millones hoy --entre ellos 24% de menos de 15 años-- pero su crecimiento demográfico se ha frenado y ha sido solamente del 1% el año pasado.
Davutoglu afirmó que el país debe mantener su tasa de fertilidad de 2,1 niños por mujer para asegurar la renovación generacional.