El Gobierno estableció hoy precios diferenciales para la venta de gas en garrafas para la Patagonia, la región de la Puna y el sur de la provincia de Mendoza, que no podrán superar los valores máximos establecidos por la Secretaría de Energía para estos consumos.
La medida fue adoptada a través de la resolución 192 de la cartera de Energía, a cargo de Mariana Matranga, dentro del alcance del Programa Hogares con Garrafas (Hogar), según se publicó en el Boletín Oficial.
Allí, dispuso establecer "precios diferenciales para la Región Patagónica, el Departamento Malargüe de la provincia de Mendoza y la Región conocida como Puna", zonas del país donde no cuentan con otro tipo de suministro domiciliario de gas.
En su articulado, la resolución estableció los beneficios de compensación para personas físicas y/o jurídicas que indiquen las provincias y que realicen ventas mayoristas de cilindros, garrafas o gas licuado de petróleo para uso domiciliario, efectuadas a "precios diferenciales inferiores" a los de mercado para las zonas mencionadas.
Dentro de la puesta en marcha del Programa Hogar, Energía dispuso el pasado 14 de abril la creación de un registro especial de beneficiarios para la Patagonia, La Puna y Malargüe, para atender los mayores requerimientos de gas en garrafas que tienen estas regiones.
A través del programa "Garrafa para todos", presentado por la mandataria Cristina Fernández de Kirchner, el Gobierno prevé destinar anualmente unos 3.000 millones de pesos en subsidios para evitar abusos o la venta en negro de las garrafas.
La iniciativa oficial propone cumplir con el pago de hasta $ 1.232 anuales para las familias de hasta cinco miembros en la zona norte y centro del país, lo que equivale al subsidio de unas 16 garrafas, y aquellas familias con más de cinco miembros recibirán hasta $ 1.540, lo que equivale a unas 20 garrafas.
Sin embargo, en la Patagonia, las familias podrían disponer de un subsidio de hasta $ 1.540 para la compra de 20 garrafas y las familias que superen los cinco miembros cobrarán unos $ 1.848, que equivale a unas 24 garrafas.
A mediados de abril pasado, la empresa YPF ofrecía las garrafas de 10 kilos a un precio máximo de 97 pesos para comercio minorista y a un tope de 54 pesos en las fraccionadoras de la petrolera, con el objeto de fijar precios de referencia para el mercado.
Allí, YPF ratificó que los beneficiarios del Programa Hogar podrían recibir un subsidio de la Nación por $ 77 por cada garrafa.
Más allá de estos precios establecidos oportunamente por Energía, la reventa de garrafas llevó su valor a $ 140 en comercios, un precio muy por encima la referencia máxima fijada desde el gobierno.