La semana que viene o "no más allá de diez días", Alberto Fernández pondrá en discusión del Congreso nacional su propuesta de reforma judicial, anuncio que realizó el 1 de marzo en la apertura de sesiones legislativas y al que también aludió en diciembre pasado cuando asumió como Presidente de la Nación.
"Al proyecto ya lo tenemos hecho, pero nos sorprendió el coronavirus", comentó el presidente, entrevistado por C5N el lunes pasado. En esa nota, Alberto Fernández puso de nuevo al proyecto de reforma de la justicia entre las iniciativas que apurará de inmediato, en paralelo con la políticas relacionadas a la emergencia sanitaria y a la necesidad de reactivar la economía.
"En 10 días aproximadamente", dijo ayer un funcionario en la Casa Rosada ante una consulta periodística sobre cuándo enviará el Ejecutivo su proyecto de reforma judicial. Los plenarios de ambas cámaras del Congreso sesionaron ayer de manera virtual.
Para el tratamiento legislativo, ya hubo contactos entre el Ejecutivo y la Cámara de Diputados, cuerpo por el que ingresará el proyecto. La secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, conversó con Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados. En la charla se acordó la posibilidad de que el proyecto pueda ser girado la semana próxima.
Todavía no ha circulado el proyecto ni un borrador. Pero algunos puntos fueron desarrollados por Alberto Fernández en distintas declaraciones. Por ejemplo, el Presidente aludió a la idea de aumentar la cantidad de jueces federales, para pasar de los actuales 12 a más de 50. El Gobierno ve en los tribunales de Comodoro Py "una gran concentración de poder (político)".
Marcelo Gallo Tagle, presidente de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional dijo estar de acuerdo “con hacer cambios”, pero también dijo que la asociación no fue consultada y mostró interés por “conocer los proyectos” de reforma.
En apoyo a la iniciativa del Ejecutivo salió el juez de la Cámara de Casación Penal, Alejandro Slokar:, referente de la agrupación Justicia Legítima. "la Justicia está emplazada a reformarse y eso no puede ser suspendido por ninguna pandemia", opinó. "La profundización del sistema democrático y republicano establece la necesaria modernización de las estructuras institucionales", dijo a El Destape Radio.
En el oficialismo, tanto en el Ejecutivo como en el Legislativo, se coincide en que para empezar una discusión tan relevante como reformar el tercer poder del Estado, debe funcionar si fisuras el Congreso en “su modo virtual”.
"Hace un ratito corté con Vilma Ibarra para coordinar cuándo sería el envío del proyecto de reforma judicial", confirmó Massa el martes a la noche a C5N.
La reforma, ha dicho Fernández, "trata de ordenar el sistema, terminar con esos espacios cerrados que le permitían a pocas personas manejar un poder enorme". La desconcentración, entonces, del fuero federal y un reordenamiento general en los tribunales con redistribución de competencias asoman como ejes del proyecto oficialista.
"Hoy no existe una mesa judicial ni un sistema de presión del gobierno sobre la justicia", dijo también el Presidente, para quien, durante el gobierno de Cambiemos, "se presionaba a jueces o se acordaba con jueces para perseguir a opositores".
"El sistema macrista era eso; lo que existe ahora son los jueces que dejó el macrismo", criticó.
En diálogo con Radio 10, el ex ministro de Justicia, León Arslanián consideró “fundamental cambiar estructuras en la Justicia, no solamente los códigos”.
"El anuncio hecho por el Presidente (Alberto Fernández) es muy bueno y los trabajos previos han tenido un enorme grado de avance", dijo Arslanián.
Aunque no figuraría en el proyecto de reforma, en el gobierno también se discute el funcionamiento de la Corte Suprema de Justicia. "Yo pienso que no debe aumentarse el número de los jueces de la Corte, pero hay toda una discusión sobre eso", dijo Fernández esta semana. Habló de la necesidad de crear un "consejo consultivo" de expertos.