El Gobierno demora el envío del proyecto de legalización del aborto al Congreso, al parecer por la inconveniencia que supone visibilizar toda acción que no esté relacionada con la contención del coronavirus. Ya se cumplieron los diez días de plazo en los que el presidente Alberto Fernández? -según había anunciado- enviaría la iniciativa, que aún no ingresó a la Cámara de Diputados. En la Casa Rosada ya hablan de que se hará "la semana que viene".
Sin embargo, en la cámara baja ya quedaron conformadas las cuatro comisiones en las que se debatirá la iniciativa antes de llegar al recinto. Todas son presididas por diputados "verdes" y del oficialismo.
Esto quedó confirmado esta semana, cuando los bloques terminaron de definir internamente quiénes estarían al frente de cada una de las 46 comisiones permanentes.
A las presidencias de las cuatro por las que pasará el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) se las quedó el Frente de Todos.
En 2018 las cuatro comisiones de plenario en que se debatió el proyecto de legalización del aborto también fueron presididas todas por diputados de Cambiemos, que entonces era el oficialismo, aunque dos de ellos eran verdes (a favor del aborto) y dos, celestes (en contra).
El presidente de la comisión de Legislación General, cabecera del plenario, fue el macrista Daniel Lipovetzky (verde); la de Salud, la macrista Carmen Polledo (celeste); la de Familia, la radical Alejandra Martínez (verde); y la de Legislación Penal, la radical Gabriela Burgos (celeste).
Ahora, la presidenta de la comisión de Legislación General -que al igual que en 2018 también sería la cabecera del plenario- será la massista Cecilia Moreau; el de Salud, el peronista Pablo Yedlin; la de Mujer (comisión nueva que reemplaza a la de Familia), la kirchnerista Mónica Macha; y la de Legislación Penal, la también kirchnerista Carolina Gaillard.
El 1 de marzo, en su discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, Alberto Fernández anunció que mandaría al parlamento "en los próximos diez días" el proyecto de legalización del aborto. El plazo venció el miércoles último.
El oficialismo hizo saber esta semana que el Ejecutivo mandaría el proyecto ayer mismo, pero con la confirmación de los casos de coronavirus en la Argentina y la declaración de pandemia de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Gobierno decidió concentrar todos los esfuerzos y la atención en esta emergencia sanitaria.
Ahora, según dijeron autoridades de la Cámara de Diputados el proyecto se mandaría, con suerte, el próximo lunes.
De cualquier manera, el Gobierno ha hecho saber que quiere un tratamiento del tema sin dilaciones, porque entiende que estas perjudican su objetivo político, que es tener legalizado el aborto antes del segundo semestre.
Tema instalado
En diálogo con este diario, el diputado Yedlin dijo que la situación para el debate de la legalización del aborto "es diferente a la de hace dos años", porque "ahora el tema está instalado, la sociedad tiene una opinión, o dos, y no se justifican cuatro meses de discusión".
De todas maneras, quien presidirá la comisión de Salud sostuvo que "sí habrá que escuchar a referentes del Ministerio de Salud de la Nación y a quienes quieran opinar en contra". "No debería ser una discusión exprés pero sí concisa, efectiva, que no dilate los tiempos", planteó.
En Diputados los números son favorables al proyecto: se cuentan hasta ahora 117 legisladores a favor, 103 en contra y 37 indefinidos. Los verdes están a 12 votos de asegurarse la victoria.
En el Senado, en cambio, los celestes llevan ventaja: 36 en contra, 32 a favor y 4 indefinidos.
La reforma judicial, otra “víctima” del virus
El efecto coronavirus trastocó la agenda presidencial y, por ende, la del Congreso. Otro de los proyectos que está demorado es la reforma judicial, que preparaba la Casa Rosada para enviar al Congreso en estos días pero fue postergado "hasta nuevo aviso".
Ese proyecto tiene por objetivo diluir el poder de los 12 juzgados federales de Comodoro Py, que actúan en las causas por corrupción de los gobiernos nacionales y donde están radicadas las principales investigaciones judiciales contra la vicepresidenta Cristina Kirchner. En el Senado que ella preside esperan ahora el proyecto.
Para curas villeros, “no está en la prioridad de los pobres”
El equipo de Curas de Villas y Barrios Populares de la ciudad y la provincia de Buenos Aires sostuvo ayer que la legalización del aborto "no está en la prioridad de los más pobres ni de la Argentina profunda" y consideró que, ante la "delicada" renegociación de la deuda externa que enfrenta el gobierno nacional, se necesita "estar unidos como pueblo y no elegir temas que enfrenten a los ciudadanos".
Ante el anuncio del presidente Alberto Fernández de que en los próximos días enviará al Congreso el proyecto, los sacerdotes difundieron una declaración titulada "Cuidando la Vida, construimos nuestros barrios".
“Sabemos que el aborto existe y no negamos esa realidad pero creemos que la interrupción del embarazo no es camino de solución a los profundos problemas que sufren muchas mujeres”, advirtieron.
Los sacerdotes expresaron que “en tiempos de crisis es necesario discernir prioridades” y, tras valorar la iniciativa del gobierno “en la lucha contra el hambre” y en el “deseo de un país más federal”, sostuvieron que tienen “la intuición de que la legalización del aborto no está en la prioridad de los más pobres, ni de la Argentina profunda”.
El pronunciamiento de los curas villeros se sumó al mensaje que el presidente del Episcopado, monseñor Oscar Ojea, sostuvo el domingo 8 de marzo: "No es lícito eliminar ninguna vida humana", dijo.
