Sin acuerdo por la “letra chica”, el debate por el endeudamiento seguirá en suspenso hasta el lunes que viene a la tarde. El texto que plasmó un pacto entre el gobernador en ejercicio, el peronista Francisco Pérez, y el electo, el radical Alfredo Cornejo, no pasó su primera consideración legislativa y quedó “congelado” con el pedido de un cuarto intermedio por no llegar a una negociación entre el Frente para la Victoria (FpV) -que aún no se ordena hacia adentro- y la Unión Cívica Radical (UCR).
El partido que responde con “unanimidad” a Cornejo quería votar tal como estaba el proyecto de ley de endeudamiento que envió Pérez a la Legislatura y prevé, en su “núcleo duro”, un financiamiento por $ 5.800 millones. Esto era concedido por el FpV, aunque la negativa estaba en los “artículos complementarios” que dan crédito para “la amortización de la deuda pública” y la toma de bonos y títulos.
Sin poder salvar estas diferencias, la sesión especial de la Cámara de Diputados de ayer se prorrogó, a voluntad del justicialismo, por cinco días más, con chances de que si se resuelve políticamente el fin de semana, el lunes tenga media sanción y el martes siga su camino en el Senado.
Pero para esto, primero los acuerdos. Ayer, el encuentro en el recinto fue breve, pero no así el “tire y afloje” entre los legisladores e intendentes. El cuarto intermedio, que se pidió ni bien se inició la sesión, se extendió por más de tres horas y convocó a todos los referentes, que buscaron negociar los puntos en los pasillos y despachos. Hasta Cornejo se hizo presente en la Legislatura para intentar ordenar la tropa ajena.
En una de las reuniones a puertas cerradas que se hicieron, según trascendió, el mandatario electo tuvo un encontronazo con el presidente de la Cámara de Diputados, el peronista Jorge Tanús.
Cinco días
A diferencia del radicalismo, que se encolumnó detrás de Cornejo, el oficialismo nunca hizo suyo lo pactado por el Gobernador y a la vez presidente del PJ. Por eso no hubo un interlocutor que defendiera la letra redactada y firmada por Pérez. “Están ‘descabezados’ y piden modificar todos los artículos”, decían ayer los radicales, al tiempo que sostenían que no iban a tocar ni un solo punto del proyecto. Más tarde, reconocían que si la propuesta “era razonable” estaban dispuestos a negociar.
A las diferencias en el interior del FpV se le sumaba la danza de los intendentes que iban y venían, con cierta carga de dramatismo, entre los despachos de Tanús y del vicegobernador Carlos Ciurca. En ese deambular se pudo ver a Emir Félix, de San Rafael; Alejandro Bermejo, de Maipú; Rubén Miranda, de Las Heras, y hasta Luis Lobos, de Guaymallén.
No faltó quien señalara que la pelea en el FpV había llegado a confrontar a los legisladores del partido con los intendentes, quienes pedían más dinero para las comunas a la vez que se medían internamente como futura oposición. “Vamos a pedir un informe de Hacienda para evaluar cuáles son las demandas de los municipios, fuera de la coparticipación. Hay distintos tipo de demandas, pero queremos una información detallada para no incorporar recursos de más en virtud de la situación financiera de la provincia”, señaló Tanús.
La falta de acuerdo también se trasladó a las definiciones, en donde unos decían que es una pelea política, mientras los otros defendían que es una cuestión de números.
Entre estos últimos, estaba la UCR, que anunciaba que el lunes ya se evidenciarían los problemas de caja sin una ley que autorice endeudamiento. “El Gobierno no tiene para pagar los sueldos ya que se han pasado con el descubierto del Banco Nación. A esto se le suma la amenaza del paro de micros y la deuda con los proveedores”, sostuvo el diputado Martín Kerchner.
“A nosotros nos coloca en una situación bastante extraña, porque ya se hizo una negociación con el Gobernador y los ministros, y ahora nos someten a una doble negociación. Este proyecto ha sido enviado nada más ni nada menos que por el Gobernador de la provincia de Mendoza, el doctor Pérez, y además el presidente del Partido Justicialista. Resulta que llegamos a este ámbito y nos encontramos con que debemos realizar otra negociación con otro sector del justicialismo”, señaló las contradicciones Néstor Parés, presidente del bloque de diputados radical.
En el FpV, apuntaban a la teoría de una pelea política en la que ya cedieron “en la parte que más costaba digerir” con el reconocimiento de un déficit de $ 6 mil millones, aunque no así con otros artículos que consideran “un cheque en blanco” para próximos endeudamientos y la autorización a la emisión de títulos y bonos. Esta primera versión es rechazada por la UCR,que sostiene que todo es “para pagar la fiesta de ellos”.